¿Es real el mundo cuántico? La interpretación de Copenhague: defensores y detractores

Copenhague bajo la lupa: Bohr, Heisenberg y Born frente al realismo de Einstein y Schrödinger, las variables ocultas de Bohm y los muchos mundos de Everett.
Fuente: ChatGPT / E. F.

La interpretación de Copenhague es el marco de lectura más influyente para entender la mecánica cuántica desde finales de los años veinte. No es una única frase cerrada, sino un conjunto de ideas articuladas por Niels Bohr, Werner Heisenberg y Max Born sobre indeterminación, probabilidad y el papel de la medida. Ese paquete conceptual se convirtió en la ortodoxia durante buena parte del siglo XX y moldeó generaciones de libros y cursos de física, en buena medida por su eficacia práctica y por el liderazgo intelectual del Instituto de Bohr en Copenhague. De hecho, aún hay desacuerdo.

Qué es, en pocas líneas, la interpretación de Copenhague

Se puede reducir en dos conceptos clave:

  1. Superposición y colapso: Un sistema cuántico puede estar a la vez en varios estados posibles hasta que medimos; la medida selecciona un resultado y rompe la superposición (colapso). La teoría describe el mundo esencialmente en términos probabilísticos a esa escala.
  2. Complementariedad: Según Bohr, rasgos como los de onda y partícula son descripciones mutuamente excluyentes pero necesarias; qué aspecto se revela depende de cómo intervenimos en el experimento. La teoría es completa en el ámbito que definen los arreglos de medida.

Qué convence a sus defensores

  • Sencillez operativa y poder predictivo: Una vez aceptado el giro conceptual, Copenhague ofrece una lectura directa de las ecuaciones y guía con éxito el cálculo y la predicción. Esa economía de supuestos facilitó su adopción en manuales y aulas.
  • Marco común de trabajo: El “idioma” de Copenhague normalizó prácticas de medida y análisis en múltiples áreas —desde espectros atómicos y láseres hasta semiconductores y superconductividad—.
  • Claridad conceptual sobre la medida: Bohr reformuló el fenómeno cuántico como algo indivisible durante la medida; el tipo de intervención experimental determina qué rasgo se hace accesible.
Fuente: ChatGPT / E. F.

Qué objetan sus críticos (y qué proponen)

  • Albert Einstein: Sostuvo que el mundo debe tener propiedades definidas también sin medir. Con la paradoja EPR (1935) argumentó que el entrelazamiento sugiere que la teoría no es completa y que deberían existir variables ocultas más profundas.
  • Erwin Schrödinger: Defendió que la función de onda es algo físico y planteó el experimento mental del gato para evidenciar las dificultades de aplicar sin matices la superposición a objetos macroscópicos.
  • De Broglie–Bohm: Restauran trayectorias y determinismo mediante una “onda guía” y un potencial cuántico no local. Explican los mismos datos que la formulación estándar, pero al precio de una no-localidad explícita y una ontología más pesada.
  • Everett (muchos mundos): Elimina el colapso, pues todas las posibilidades se realizan en ramas del universo que se separan en cada medida. Mantiene siempre la evolución unitaria, pero choca con la intuición cotidiana.
  • Decoherencia: Desde los años setenta, explica por qué la superposición se desvanece por interacción con el entorno, haciendo que el mundo macroscópico parezca clásico sin postular colapsos ad hoc. No resuelve por sí sola la interpretación, pero aclara el puente micro–macro.
Fuente: ChatGPT / E. F.

Por qué ganó (y sigue viva) la ortodoxia

Además de sus éxitos empíricos, la interpretación de Bohr y Heisenberg prosperó por su menor carga metafísica frente a alternativas, por la centralidad institucional del Instituto de Copenhague y por el liderazgo intelectual de Bohr. El resultado fue un consenso práctico que, con matices, perdura. Desde los años setenta, los tests del entrelazamiento y las desigualdades de Bell dejaron en mala posición a las variables ocultas locales, reforzando la aceptación de correlaciones no clásicas.

Cuadro resumen

Aspecto Interpretación de Copenhague (ideas y nombres) Críticas y alternativas (ideas y nombres)
Nombres representativos Niels Bohr, Werner Heisenberg, Max Born, Wolfgang Pauli. Albert Einstein, Erwin Schrödinger, Louis de Broglie, David Bohm, John Bell, Hugh Everett III, John A. Wheeler, Bryce DeWitt, David Deutsch, H. Dieter Zeh, Wojciech Zurek, Gian Carlo Ghirardi, Alberto Rimini, Tullio Weber, N. David Mermin, Christopher Fuchs, Rüdiger Schack, Leslie Ballentine, Robert B. Griffiths, Roland Omnès, Murray Gell-Mann, James Hartle.
Núcleo Superposición hasta la medida; colapso de la función de onda; complementariedad. (Bohr, Heisenberg, Born, Pauli). Rechazo del colapso o explicación alternativa: determinismo con variables ocultas (de Broglie, Bohm); muchos mundos sin colapso (Everett, DeWitt, Deutsch); colapso objetivo (Ghirardi, Rimini, Weber); interpretación estadística/ensemble (Ballentine); QBism (Mermin, Fuchs, Schack); historias consistentes (Griffiths, Omnès, Gell-Mann, Hartle).
Realismo y medida Propiedades definidas solo en el contexto del aparato de medida; teoría completa en términos probabilísticos. (Bohr, Heisenberg). Realismo fuerte: partículas con propiedades definidas siempre; la teoría estándar es incompleta. (Einstein, de Broglie, Bohm; Ballentine).
No-localidad y entrelazamiento Acepta correlaciones no clásicas sin mecanismo subyacente especificado; foco en consistencia experimental. (Bohr, Heisenberg). Variables ocultas no locales (Bohm); crítica a la “acción fantasmagórica” (Einstein); formulación y pruebas de desigualdades que descartan variables ocultas locales (Bell; experimentos de Aspect, Clauser y Zeilinger).
Ventajas que ven sus defensores Marco operativo simple y exitoso para calcular y predecir; lenguaje común de la física del siglo XX. (Bohr, Heisenberg, Born, Pauli).
Objeciones principales Problema de la medida (qué es exactamente el colapso); tensión con la intuición clásica y el realismo fuerte. (Señalado por Einstein, Schrödinger, Bell). Alternativas que preservan determinismo o unitariedad total: piloto/onda guía (de Broglie, Bohm); evolución unitaria sin colapso (Everett, Wheeler, DeWitt, Deutsch); colapso objetivo (GRW).
Puentes explicativos Decoherencia ambiental como explicación del aparente colapso y del mundo clásico emergente. (Zeh, Zurek).
Experimentos y evidencias Éxitos predictivos generalizados en espectros, láseres, semiconductores y estado sólido. Tests de Bell y entrelazamiento que descartan variables ocultas locales y obligan a aceptar no-localidad o a renunciar al realismo fuerte. (Bell; Aspect, Clauser, Zeilinger).

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