¿Qué es la ‘mano invisible’ de Adam Smith?

Este término fue empleado por el filósofo y economista escocés para referirse a la tendencia que tiene el libre mercado de autocorregirse.
Mano invisible Adam Smith

La ‘mano invisible’ es un concepto clave en la economía moderna que fue propuesto por el filósofo y economista escocés Adam Smith en el siglo XVIII. ¿Sabes de qué se trata?

El concepto de la mano invisible en la economía

La búsqueda del interés personal y el beneficio social

La ‘mano invisible’ es un concepto económico creado por Adam Smith según el cual el interés personal y egoísta de un individuo puede acabar por repercutir positivamente en el conjunto de la sociedad. Según Smith, el ser humano tiene como primera tendencia el amor por sí mismo y la búsqueda de su propio beneficio, pero al mismo tiempo puede sentir empatía por otros y eso le hace abandonar parcialmente sus impulsos egoístas. La ‘mano invisible’ es la representación ficticia de una fuerza que provoca este equilibrio y compensa las contradicciones de las leyes del mercado o, visto de otra manera, una ilustración de la ley de la oferta y la demanda.

Interacción entre mercado libre y regulación

Smith defendía a través de su ‘mano invisible’ que en un mercado libre la tendencia natural era la de buscar el beneficio común a partir de los intereses individuales. Por ejemplo, la motivación por la que un fabricante de bombillas crea su producto es la de obtener beneficios al venderlo, pero al hacerlo genera empleo y cubre las necesidades de la población por lo que su interés egoísta acaba por servir a otros. Si llega un momento en el que la población ya no necesita bombillas, no les interesará comprarlas y el fabricante tendrá que buscar un nuevo producto para seguir obteniendo beneficios (oferta-demanda).

Mano invisible. Fuente: Pixabay

Limitaciones y fortalezas de la mano invisible

Críticas a la teoría de Adam Smith

El principal problema de la teoría de Smith, al igual que le pasaría a Karl Marx con la dictadura del proletariado, es que la realidad suele ser más compleja y el equilibrio entre egoísmo y empatía más difícil de conseguir. Precisamente para este punto, Adam Smith diferenciaba entre interés propio y avaricia y defendía que el ser humano quiere vivir en una sociedad de derechos en la que se respeta al ciudadano, por lo que se acabará anteponiendo el bien común a la riqueza o el poder individual, de nuevo, gracias a la ‘mano invisible’.

Excepciones: la tragedia de los comunes

Adam Smith también señalaba algunos casos en los que el libre mercado y, por lo tanto, la ‘mano invisible’ no podrían aplicarse o no serían apropiados. Así ocurre con lo que más tarde se denominó ‘tragedia de los comunes’, una situación en la que el consumo o uso de unos bienes públicos (comunes) limitados no beneficia al conjunto. Esta situación se ejemplificó por primera vez con un prado en el que varios pastores, sin consultarse y pensando en que no tendría consecuencias para los demás, ampliaron su rebaño y provocaron que el prado se consumiera y tanto ellos como sus ovejas murieron de hambre. En la actualidad, suele ser aplicable con las políticas medioambientales.

Impacto de la mano invisible en la economía actual

Innovación y crecimiento económico

La ‘mano invisible’ sigue siendo un concepto relevante en la economía contemporánea, especialmente en relación con la innovación y el crecimiento económico. En un mercado libre, la competencia entre empresas incentiva la innovación, ya que cada una busca diferenciarse de las demás y capturar una mayor cuota de mercado. Este proceso de innovación no solo mejora la calidad de los productos y servicios, sino que también impulsa el crecimiento económico al generar nuevas oportunidades y empleos.

El papel de la ‘mano invisible’ en la promoción de la innovación se observa en sectores como la tecnología, donde las empresas compiten constantemente para ofrecer productos más avanzados y eficientes. Este dinamismo económico es un ejemplo de cómo el interés personal puede conducir a beneficios sociales, al proporcionar a los consumidores mejores opciones y precios más competitivos. Sin embargo, es importante reconocer que la innovación también puede generar desigualdades, y que la ‘mano invisible’ no siempre garantiza una distribución equitativa de los beneficios.

El concepto de 'mano invisible' presupone la existencia de un equilibrio entre beneficio individual y beneficio colectivo. Fuente: Pixabay

Rol del Estado en la corrección de fallas de mercado

Aunque la ‘mano invisible’ promueve la autorregulación del mercado, el papel del Estado sigue siendo crucial en la corrección de fallas de mercado. Los monopolios, las externalidades negativas y la información asimétrica pueden impedir que el mercado funcione de manera eficiente y equitativa. En estos casos, la intervención estatal es necesaria para garantizar que el mercado opere en beneficio de la sociedad.

El Estado puede desempeñar varias funciones para corregir las fallas del mercado. Por ejemplo, puede regular los monopolios para asegurar que no abusen de su poder de mercado y que los consumidores tengan acceso a opciones justas. También puede imponer impuestos o regulaciones para mitigar las externalidades negativas, como la contaminación, y asegurar que las empresas internalicen los costos sociales de sus actividades. Además, también puede intervenir para proporcionar bienes públicos y garantizar que todos los individuos tengan acceso a servicios esenciales, como la educación y la salud.

Sobre Adam Smith y su legado intelectual

Biografía de Adam Smith

Adam Smith nació en Kirkcaldy (Escocia) el 16 de junio de 1723. Amigo de David Hume desde su juventud, fue un hombre letrado que estudió en la Universidad de Glasgow y en Oxford y ejerció en ambas como profesor ayudante de Retórica y Literatura y como catedrático de moral respectivamente. Viajó por Europa y estuvo en contacto con la élite intelectual de la época.

Adam Smith ejerció como director de Aduana de Edimburgo en 1788 y hasta el día de su muerte, el 17 de julio de 1790.

El estado puede corregir los desmanes del mercado interviniendo en sectores clave como la salud y la educación. Fuente: Pixabay

Principales obras: "La riqueza de las naciones" y "Teoría de los sentimientos morales"

En 1776 publicó el libro por el que sería conocido hasta la actualidad, La riqueza de las naciones, en la que exponía su teoría económica y gracias al cual es considerado el padre del sistema liberal capitalista tan arraigado en los países occidentales. El autor, que a diferencia de Hume defendía el acceso cotidiano e inmediato a un mundo exterior independiente de la conciencia, hacía alarde de un razonamiento sistemático y científico para respaldar sus teorías. Al mismo tiempo, Smith veía una bondad innata en el ser humano y una preocupación en sus semejantes que hacía que el mercado se regulase sin necesidad de intervención estatal.

Otra de sus obras destacadas fue Teoría de los sentimientos morales. En este ensayo, Smith explora la naturaleza humana y la importancia de la empatía en las relaciones sociales. Esta obra complementa su pensamiento económico al subrayar que el comportamiento humano no se rige únicamente por el interés propio, sino también por un sentido de justicia y moralidad.

Referencias

  • Harrison, Peter. 2011. "Adam Smith and the history of the invisible hand". Journal of the History of Ideas, 72.1: 29-49. DOI:10.1353/jhi.2011.a413473

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