Lograr la neutralidad de carbono a medio plazo en España pasa por generar actividad económica baja en carbono y resiliente al clima, contribuir al cumplimiento de los objetivos de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y fomentar el desarrollo tecnológico para la descarbonización y la resiliencia del clima en sectores clave de la economía, sobre todo, mediante actuaciones de ámbito nacional.
Algo para lo que el fabricante automovilístico Mazda tiene un objetivo claro: recuperar un espacio degradado, digitalizar más procesos de gestión de los espacios naturales y contribuir a la consolidación del 'Modelo Soria'.

En detalle, a partir de este 2023, y de la mano de Cesefor -organización sin ánimo de lucro que promueve la innovación, la sostenibilidad y la investigación-, iniciará un ambicioso plan de compensación de la huella de carbono con la plantación de seis hectáreas que se realizará a partir de otoño de 2024 en la zona San Pedro Manrique dentro de la extensa masa forestal de Soria, cumpliendo con las tres fases obligatorias: medición, reducción y compensación.
El 'Modelo Soria', que habla de cómo es dicha tierra, la gestión de sus montes y la implicación de quienes viven allí, se basa en tres ejes principales que hacen singular esta forma de gestión.

En primer lugar, la gestión forestal sostenible de productos madereros y no madereros, y de otros servicios que prestan estos bosques. En segundo término, la cooperación entre todos los agentes involucrados en esa gestión, desde propietarios de los montes, en sintonía con el tejido empresarial, a administraciones públicas.
Y, finalmente, el 'Modelo Soria' que se basa en un consenso social, entendido como la interiorización plena del vínculo entre el entorno y sus habitantes, que están implicados en esa gestión de los recursos de todos.

Mazda no solo pretende reducir sus emisiones a través de proyectos medioambientales, también con su amplia gama eficiente. Uno de los modelos con extraordinarias credenciales sostenibles es el CX-60 PHEV, el primer híbrido enchufable de la marca con un consumo medio de solo 1,5 l/100 km y tan solo 33 g/km de emisiones de CO2. Gracias a su motor eléctrico, y cuando el vehículo circula por debajo de 100 km/h, puedes conseguir hasta 63 km completamente eléctricos puros.

La punta de lanza de la estrategia de la electrificación de Mazda pasa por el MX-30, un modelo 100% eléctrico; y con una versión enchufable denominada MX-30 e-Skyactiv R-EV. Este modelo representa perfectamente la estrategia multisolución de Mazda en su camino hacia la neutralidad en carbono: un coche que funciona como un vehículo eléctrico para la vida diaria, pero que también incorpora un motor de combustión capaz de generar electricidad en los desplazamientos más largos, de modo que el conductor siempre pueda relajarse y disfrutar del viaje.