Los psicópatas son personas egoístas, con limitadas emociones, falta de empatía hacia los sentimientos de los demás y ausencia de remordimientos. Además, según los expertos, se comportan como si el mundo pudiera ser usado en su beneficio. Con el fin de reconocerlos, investigadores de la Universidad de Cornell (EE UU) han usado técnicas de análisis del habla por ordenador para averiguar si existe un patrón en las palabras que usan los psicópatas que pueda ayudar a identificarlos en una simple conversación. Y lo han encontrado.
El lenguaje de los psicópatas: características principales
Análisis del habla y patrones lingüísticos
El estudio del lenguaje de los psicópatas ha mostrado que existen patrones específicos que los distinguen. Mediante técnicas avanzadas, se han identificado palabras y estructuras gramaticales comunes entre ellos. Este tipo de análisis, que descompone el discurso en sus elementos básicos, permite detectar diferencias sutiles que pasan inadvertidas en una conversación común. Los psicópatas tienden a emplear un discurso más estructurado, menos emocional y con una carga cognitiva notable al describir actos intensos con gran desapego.
La coherencia superficial, acompañada de una falta de profundidad emocional, refleja su visión del mundo y su forma de relacionarse. Esta comunicación, aunque persuasiva, carece del trasfondo afectivo que se encuentra en individuos sin este perfil. El lenguaje, de esta manera, se convierte en una herramienta que utilizan para manipular y ejercer control.
Palabras concretas y su relación con los crímenes

Una de las características más llamativas es su tendencia a usar palabras concretas al hablar de sus crímenes. Emplean un vocabulario que muestra un enfoque pragmático y calculador, usando términos como "porque" o "por lo tanto" para describir actos con una lógica fría y premeditada. Además, se centran en necesidades tangibles como el dinero, el sexo o la comida, y omiten aspectos abstractos o emocionales relacionados con la familia o la religión.
Este énfasis en lo material contrasta con la ausencia de referencias más emocionales o sociales, sugiriendo una visión del mundo utilitaria y desconectada del componente afectivo. Sus relatos carecen de detalles emocionales, enfocándose en la parte más calculadora, como si describieran simples hechos en vez de experiencias humanas con repercusiones emocionales.
Uso de conjunciones y objetivos claros
El empleo frecuente de conjunciones como "porque", "por lo tanto" o "entonces" indica que, al expresarse, suelen tener metas definidas. Este uso del lenguaje sugiere que perciben sus actos como parte de un plan lógico y secuencial. Ven sus crímenes no como impulsos, sino como acciones dirigidas a fines específicos, lo que aporta información sobre su forma de pensar y de tomar decisiones.
Además, las conjunciones revelan una forma de ver a los demás como medios para alcanzar un objetivo. El lenguaje instrumental y orientado a metas muestra su capacidad para manipular, utilizando cada conversación como un paso más hacia el logro de sus intereses personales.
Necesidades prioritarias y lenguaje instrumental
Referencias a necesidades físicas: alimentos, sexo, dinero
El lenguaje psicopático prioriza la satisfacción de necesidades físicas y materiales. Mencionan con mayor frecuencia el dinero, el sexo o la comida, reflejando una orientación hacia beneficios inmediatos y tangibles. Esta mirada centrada en lo concreto se alinea con su desconexión emocional y su falta de empatía, ya que no experimentan interés genuino por aspectos más profundos de la vida humana.
La importancia concedida a estos recursos y placeres físicos guía su comportamiento y sus decisiones. De este modo, su discurso se convierte en un reflejo de sus verdaderas prioridades y les sirve para mantener el foco en lo que resulta provechoso para ellos.
Escasa mención a la familia, religión y necesidades sociales
En contrapartida, los psicópatas rara vez hacen referencia a la familia, la religión o las necesidades sociales. La ausencia de estos temas en su discurso demuestra su desconexión con esferas emocionales y afectivas. Su mundo interno se muestra pobre en lazos significativos, lo que evidencia su dificultad para establecer relaciones auténticas o valorar las dinámicas sociales más allá de su utilidad instrumental.
Esta carencia de referencias emocionales y sociales delata su indiferencia ante los vínculos humanos, un rasgo clave que facilita su capacidad para instrumentalizar a quienes los rodean sin sentir culpa ni remordimiento.
Uso del tiempo verbal y fluidez en el discurso
Predominio del tiempo pasado en el habla
El empleo mayoritario del tiempo pasado al describir sus actos revela otro patrón. Al contar sus crímenes en pasado, muestran un distanciamiento emocional respecto a los eventos. Ven sus acciones como hechos consumados, sin repercusiones emocionales presentes, lo que facilita que se desvinculen de cualquier responsabilidad afectiva.

Este enfoque temporal puede interpretarse como un modo de racionalizar sus experiencias, restando importancia al dolor causado y evitando toda conexión empática con las consecuencias de sus actos.
Menor fluidez: muletillas y pausas
La falta de fluidez es otro rasgo del discurso psicopático. Utilizan más muletillas, pausas y "ums" o "uhs", indicando una mayor carga cognitiva al describir hechos. Pese a su aparente seguridad, esta falta de naturalidad verbal puede reflejar el esfuerzo mental que hacen para mantener una fachada coherente y racional.
La incoherencia y el uso forzado del lenguaje pueden ser signos de la presión interna que experimentan al simular emociones, justificando sus actos sin realmente sentir empatía o responsabilidad.
Psicopatía y características emocionales
Egoísmo y visión instrumental del mundo
La psicopatía se asocia con el egoísmo extremo y la cosificación del prójimo. Conciben personas y situaciones como herramientas para lograr sus fines, evidenciando un desapego emocional total. El discurso se convierte entonces en un reflejo de este enfoque utilitario, centrado en el beneficio propio sin importar las consecuencias para otros.
En su lenguaje, la ausencia de vínculos afectivos y el énfasis en lo material demuestran un perfil profundamente marcado por la explotación y la indiferencia hacia las necesidades ajenas.
Déficit emocional: falta de empatía y remordimiento
La incapacidad para sentir empatía o remordimiento es una cualidad esencial en los psicópatas. Su discurso carece de verdaderas expresiones emocionales, sin asomo de culpa ni empatía por las víctimas. Esto explica la frialdad con la que narran sus actos y la facilidad para justificar comportamientos crueles o dañinos.
Este déficit emocional influye en todas las facetas de su conducta y su forma de comunicarse, reforzando la imagen de personas ajenas a las normas morales y al sufrimiento de otros.

Identificación de psicópatas mediante el análisis del lenguaje
Técnicas modernas: análisis por ordenador
La tecnología ha permitido dar un gran paso en la detección de patrones lingüísticos. El análisis por ordenador, capaz de procesar enormes volúmenes de datos, identifica indicios sutiles del lenguaje psicopático. De esta manera, se obtienen resultados objetivos que ayudan a perfilar con mayor precisión este trastorno.
Estas herramientas son invaluables en campos como la psicología forense, ya que facilitan el reconocimiento temprano de rasgos psicopáticos, contribuyendo a la prevención de delitos y al desarrollo de estrategias de intervención más eficaces.
Investigaciones de la Universidad de Cornell y EE UU
Los estudios de la Universidad de Cornell han sido decisivos. Sus investigaciones pioneras han revelado cómo ciertos rasgos del lenguaje pueden servir como indicadores fiables de psicopatía. Al identificar la frecuencia de ciertas palabras, el uso del tiempo verbal y la estructura gramatical, han allanado el camino para una mejor comprensión del trastorno.
Estos hallazgos han servido de referencia para la comunidad científica, impulsando nuevas líneas de investigación y posibilitando la creación de herramientas más precisas para diagnosticar y abordar la psicopatía.
Referencias:
- Hare, R.D. (1993). Without Conscience: The Disturbing World of the Psychopaths Among Us. The Guilford Press.
- Cleckley, H. (1988). The Mask of Sanity. C.V. Mosby Company.
- Hancock, J.T., Woodworth, M.T., & Porter, S. (2011). Hungry like the wolf: A word-pattern analysis of the language of psychopaths. Legal and Criminological Psychology.
- Patrick, C.J. (ed.) (2018). Handbook of Psychopathy. The Guilford Press.