Un hallazgo extraordinario ha devuelto a la localidad normanda de Avranches una parte olvidada de su historia. Tras más de dos siglos de ausencia, un valioso manuscrito medieval procedente del Mont Saint-Michel ha regresado a la región de la que fue arrebatado durante la Revolución Francesa. Se trata de una pieza excepcional tanto por su contenido como por su procedencia. Su recuperación supone un hito en la restitución del patrimonio documental perdido.
Un regreso inesperado tras más de dos siglos de ausencia
La historia de la desaparición de este manuscrito comienza a finales del siglo XVIII, cuando, en el contexto revolucionario, se expropió y dispersó la biblioteca del monasterio del Mont-Saint-Michel. Muchos de sus volúmenes desaparecieron sin dejar rastro, en medio del caos de las confiscaciones y ventas.
Este manuscrito en concreto se dio por perdido durante más de 200 años, hasta que, en 2018, apareció de forma inesperada en el catálogo de una casa de subastas de Alençon. Un estudioso advirtió en la pieza ofertada ciertas características que apuntaban a un origen monástico. La caligrafía, los elementos decorativos, el contenido y sobre todo, una prosa litúrgica dedicada a san Aubert, obispo de Avranches y figura fundacional del Mont-Saint-Michel, dieron la voz de alarma.
Tras una investigación minuciosa y la consulta de inventarios históricos, se confirmó que el manuscrito había pertenecido a la biblioteca del Mont saint-Michel. En abril de 2023, el texto se restituyó al estado como bien nacional y, tras pasar por un proceso de restauración y digitalización, se entregó a la ciudad de Avranches el 27 de junio de 2025. En una ceremonia solemne, el director del Libro y la Lectura del Ministerio de Cultura, junto con el alcalde David Nicolas, celebraron este regreso.

Un manuscrito singular: música, liturgia, filosofía y humor
Variedad de textos medievales
El manuscrito recuperado es una obra que recoge cuatro textos medievales diferentes, todos destinados a la enseñanza. Aunque los textos se redactaron entre los siglos XII y XIII, las partes litúrgicas probablemente se copiaron en el propio scriptorium del Mont-Saint-Michel. Las secciones filosóficas, por su parte, podrían haber sido escritas por monjes estudiantes en París, antes de ser llevadas al monasterio. Este cruce de influencias ilustra la vitalidad cultural del Monte durante su apogeo.
La primera parte incluye tratados pedagógicos sobre el aprendizaje musical, que probablemente sirvieron como material didáctico en el monasterio. La segunda parte contiene prosa litúrgica y poética dedicada a san Auberto, obispo en Avranches en el siglo VIII al que se le atribuyen milagros.
El texto establece una profunda analogía entre la armonía musical, la armonía divina y la armonía del alma humana. Esta composición resulta especialmente significativa porque representa la versión más antigua conocida del texto, anterior incluso a las copias del siglo XVII que se conservan. Su descubrimiento arroja nueva luz sobre la evolución de la liturgia en el entorno del Mont-Saint-Michel.

Alegorías y pensamiento filosófico
El volumen incluye, además, dos obras narrativas de corte filosófico y alegórico. La primera es el Architrenius de Jean de Hauville. Este poema latino sigue a un joven desesperado por los vicios del mundo, que acude a la Madre Naturaleza en busca de sentido. La segunda es una obra de Alain de Lille, también cargada de simbolismo y crítica moral. Ambos textos eran muy apreciados en los círculos monásticos del siglo XIII y servían como herramientas intelectuales para los jóvenes estudiantes.
Una ilustración autocrítica
El manuscrito también guarda algunas sorpresas de interés. Entre sus últimas páginas, aparece un dibujo singular. Representa a un personaje sentado con las piernas cruzadas que sostiene un bastón —o quizás un instrumento musical— y está acompañado de una inscripción manuscrita que dice: “Es de conocimiento general que me gusta mucho beber. Estoy molesto y sufro por no poder aprender mejor el arte de la gramática que el de la lógica”. Esta curiosa nota refuerza el carácter didáctico del manuscrito, que humaniza a quienes lo copiaron, leyeron y utilizaron hace siglos.

La biblioteca del Mont-Saint-Michel y el papel de Avranches
Avranches, ciudad episcopal de gran importancia en la Edad Media, desempeñó un papel esencial en la conservación del patrimonio monástico tras la Revolución. En 1791, cuando los manuscritos del Mont-Saint-Michel se confiscaron como bienes nacionales, Avranches se convirtió en el centro depositario de estos textos. Desde entonces, su biblioteca ha custodidado estos valiosos documentos, que hoy se exhiben en el Scriptorial, un museo dedicado a preservar y difundir este legado.
Inaugurado en 2006, El Scriptorial, alberga más de 200 manuscritos medievales y organiza exposiciones periódicas en su sala del Tesoro, donde cada tres meses se muestran una docena de volúmenes distintos. La incorporación del manuscrito recuperado a la exposición estival de 2025 ha generado una gran expectación, no solo entre los especialistas, sino también entre el público general, cada vez más interesado por la historia del Mont-Saint-Michel y sus tesoros ocultos.

El esplendor medieval del Mont-Saint-Michel
Fundado en el año 966 por una comunidad de benedictinos sobre las ruinas del oratorio construido por san Aubert, el Mont-Saint-Michel se convirtió en un símbolo de espiritualidad y erudición. Su scriptorium fue particularmente activo entre los siglos XI y XIII, coincidiendo con la expansión de la arquitectura románica y gótica en la abadía.
La fortaleza que hoy admiramos fue también un baluarte de la resistencia francesa durante la Guerra de los Cien Años. El Mont resistió todos los asedios ingleses gracias a su ubicación estratégica y sus sólidas defensas, hasta el punto de convertirse en un emblema de la nación. A lo largo de los siglos, el Mont-Saint-Michel ha atravesado múltiples transformaciones. De santuario medieval a prisión durante la Revolución, y de allí a icono turístico y espiritual en la actualidad, su historia refleja las tensiones y continuidades de la cultura europea. Desde 1979, el lugar está inscrito en la lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO, lo que subraya su valor universal.
Memoria restituida: el poder simbólico de un manuscrito reencontrado
El regreso del manuscrito, además de ser una victoria en lo que a recuperación patrimonial se refiere, también es una forma de devolver al presente la memoria intelectual del pasado. El hecho de que se haya recuperado, restaurado y expuesto al público muestra la voluntad de preservar y compartir un legado común. El contenido mismo del manuscrito —que combina música, liturgia, filosofía, crítica moral y humor cotidiano— ofrece un retrato vívido del mundo medieval que revela cómo se enseñaba y vivía en el recinto monástico del Mont-Saint-Michel.
Referencias
- 2025. "Retour exceptionnel : un manuscrit du Mont Saint-Michel réapparaît après deux siècles". Avranches. URL: https://www.avranches.fr/actualites/retour-exceptionnel-un-manuscrit-du-mont-saint-michel-reapparait-apres-deux-siecles/