Seguro que has oído un millón de veces eso de que los gatos tienen 7 vidas haciendo referencia a que son tan ágiles y rápidos que escapan de peligros que otros animales no serían capaces de esquivar. Es como si tuvieran unas cuantas vidas extras, más concretamente seis (ocho en otros países, incluidos los anglosajones), lo que obviamente es falso.
Origen del mito: entre la agilidad y la cultura
Pero ¿de dónde viene que los gatos tienen 7 vidas? ¿Cómo se creó este mito? ¿Por qué en algunos sitios se les asignan dos vidas además de las siete? La gran mayoría de las teorías existentes dan una explicación milenaria y esotérica pero, desde el punto de vista científico, bastante menos fantasioso, sí que se ha llegado a la conclusión de que estas adorables criaturas poseen unas habilidades sorprendentes, podríamos decir casi increíbles con las que logran salir airosos de situaciones realmente peligrosas.
Habilidades extraordinarias de los gatos
Los gatos tienen unas habilidades increíbles, son muy ágiles, rápidos, flexibles, tienen un sentido de la vista high-tech, son capaces de sobrevivir a caídas desde tal altura que cualquier otro animal sería incapaz de salvar y caen de pie en multitud de ocasiones gracias a su capacidad para enderezarse en vuelo, empleando su cola como timón y aterrizando elegantemente sobre sus cuatro patas.
En 1987 se llevó a cabo un estudio en la ciudad de Nueva York en el que se demostró que el 90% de los felinos que se había precipitado de un edificio alto había sobrevivido milagrosamente a la caída. El estudio se realizó a partir de más de 130 gatos que ingresaron a una clínica veterinaria de emergencia tras haber sufrido una caída desde una gran altura. El resultado fue que el 90% sobrevivió y un 37% necesitó tratamiento de emergencia para sobrevivir. Uno de ellos se precipitó desde 32 pisos al suelo y solo se partió un diente y sufrió un colapso pulmonar. A las 48 horas ya estaba en casa.

Este tipo de hazañas son las que han dado alas al famoso mito de que los gatos siempre caen de pie y al que nos ocupa, el de que tienen siete vidas o nueve, si estamos en Inglaterra. Dicho lo cual, debemos recordar que las caídas son muy peligrosas para los gatos y que debemos evitarlas a toda costa colocando dispositivos de protección en ventanas y balcones.
El estudio de 1987: supervivencia en caídas
En 1987, un estudio realizado en Nueva York proporcionó evidencia científica sobre la capacidad de los gatos para sobrevivir a caídas desde grandes alturas. El estudio analizó más de 130 casos de gatos que habían caído desde edificios altos y reveló que el 90% de ellos sobrevivieron. Este fenómeno se atribuye a su habilidad para extender sus patas y arquear su cuerpo durante la caída, lo que aumenta la resistencia al aire y reduce la velocidad de impacto.
Un caso notable del estudio fue el de un gato que cayó desde el piso 32 y sobrevivió con solo un diente roto y un colapso pulmonar. A las 48 horas, el felino ya estaba de vuelta en casa, lo que refuerza la percepción de que los gatos tienen una capacidad de recuperación excepcional. Este tipo de hazañas ha alimentado el mito de las siete vidas, ya que parece que los gatos pueden desafiar las leyes de la física y la gravedad.

El reflejo de enderezamiento y su anatomía única
El reflejo de enderezamiento es una de las características más fascinantes de los gatos. Este mecanismo les permite girar su cuerpo en el aire para caer de pie, y es posible gracias a su columna vertebral extremadamente flexible y su aparato vestibular, que les ayuda a detectar la rotación durante la caída. Además, su estructura ósea liviana y sus músculos elásticos les permiten amortiguar el impacto al aterrizar.
La anatomía única de los gatos también juega un papel crucial en su capacidad para sobrevivir a caídas. Su cuerpo está diseñado para soportar menos carga durante el impacto en comparación con otros mamíferos, lo que les da una ventaja adicional en situaciones de riesgo. Esta combinación de factores anatómicos y fisiológicos ha contribuido a la creencia de que los gatos tienen múltiples vidas, ya que parecen ser capaces de escapar de situaciones que serían fatales para otros animales.
El significado del número siete en la cultura
EL mito sobre las siete vidas de los gatos está enraizado en toda la cultura de tradición judeocristiana alrededor de ese número, que tiene una carga simbólica importante, como se supone que el 6 es el número del diablo.
¿Por qué siete vidas?
El número siete ha sido considerado desde antiguo una cifra mágica, un número que daba buena suerte. ¿Y hay algún animal que tenga tanta suerte para escapar de situaciones peligrosas y hasta mortales que el gato? Ninguno. Así que se le adjudicó esta esotérica cifra.
En nuestra cultura el siete mantiene ese aura de simbolismo y es que si se rompe un espejo, tendrás siete años de mala suerte, los días de la semana son siete, las notas musicales también, igual que los pecados capitales y el número de arcángeles. Así podríamos estar largo y tendido.
¿Y nueve en culturas anglosajonas?
Aunque por estos lares eso de que los gatos tienen nueve vidas no se oye, en muchos lugares, entre ellos los países anglosajones, es lo que suele decirse. Pero ¿por qué nueve? La respuesta hay que buscarla en la mitología egipcia. Según esta, Ra (Atum), el dios solar, formó junto con los dioses Shu, Tefnut, Nut, Geb, Isis, Osiris, Neftis y Seth la Enéada, un grupo de nueve divinidades unidas. Ra viajó a los inframundos adoptando la forma de un gato y se dotó de nueve vidas, una por cada deidad. Como el gato era considerado un animal sagrado en el Antiguo Egipto y teniendo en cuenta sus sorprendentes habilidades para burlar la muerte, se creó el mito de que tenía nueve vidas, como clara referencia al dios Ra.
La influencia de la mitología egipcia
La mitología egipcia ha tenido una influencia significativa en la percepción de los gatos y el número de vidas que se les atribuye. Según la leyenda, el dios solar Ra, también conocido como Atum, se transformó en un gato para viajar al inframundo. Durante esta travesía, Ra se dotó de nueve vidas, una por cada deidad de la Enéada, un grupo de nueve dioses egipcios.

Esta conexión entre los gatos y el número nueve en la mitología egipcia ha perdurado a lo largo del tiempo y ha influido en la forma en que se perciben los gatos en diferentes culturas. La idea de que los gatos tienen nueve vidas es una referencia directa a su asociación con la divinidad y la protección en la cultura egipcia. Así, el mito de las nueve vidas de los gatos se ha extendido más allá de las fronteras de Egipto, encontrando eco en las culturas anglosajonas y otras regiones del mundo.
Prevención de caídas: cuidando a nuestros gatos
Importancia de las medidas de seguridad en el hogar
A pesar de la fascinante habilidad de los gatos para sobrevivir a caídas, es fundamental tomar medidas preventivas para protegerlos de posibles accidentes en el hogar. Las caídas desde balcones, ventanas o terrazas pueden ser extremadamente peligrosas para los gatos, y es responsabilidad de los propietarios garantizar un entorno seguro para sus mascotas. Instalar dispositivos de protección, como redes de seguridad o mallas, es una medida eficaz para prevenir caídas accidentales.
Además de proteger las áreas elevadas, es importante supervisar a los gatos cuando están cerca de ventanas abiertas o en exteriores. La curiosidad natural de los gatos puede llevarlos a explorar lugares peligrosos, por lo que es esencial estar atentos a su comportamiento y tomar precauciones para evitar accidentes. Al garantizar un entorno seguro, no solo protegemos a nuestros gatos de posibles lesiones, sino que también les brindamos un espacio donde puedan moverse y jugar con tranquilidad.
Finalmente, es crucial recordar que, aunque los gatos son animales increíblemente resistentes, no son invulnerables. Las caídas pueden causar lesiones graves, y es responsabilidad de los dueños asegurarse de que sus mascotas estén a salvo. Al tomar medidas preventivas y estar atentos a las necesidades de nuestros gatos, podemos garantizar que vivan una vida larga y saludable, sin depender de la idea de que tienen siete o nueve vidas.
No nos dejemos llevar por el mito
Llegados a este punto, solo nos queda volver a hacer hincapié en la importancia que tiene que nuestro gato no sea un paracaidista, que podamos evitar caídas que puedan resultar fatales para el animal o que no acabando con su vida, le provoque daños en su organismo.
Si en casa tienes un balcón o una terraza, deberías colocar dispositivos de protección para evitar el peligro. No está de más proteger también las ventanas. Además, de por el animal, tú también estarás más tranquilo y podrás desentenderte. Pregunta en cualquier tienda de mascotas las opciones con las que cuentas: marco con tela mosquitera, redes de seguridad… e incluso fabricar tu propio sistema de seguridad con listones de madera y malla de plástico.