¿Por qué se mueve la planta sensitiva ‘Mimosa pudica’ al tocarla?

La planta tendría cierto control a la hora de decidir el orden de las zonas que más le conviene abrir de nuevo
mimosa

La Mimosa pudica, conocida como la planta sensitiva, es una fascinante angiosperma de la familia de las leguminosas originaria del Caribe y América del Sur y Central. Destaca por su capacidad de movimiento rápido, cerrando sus hojas al ser tocada, un fenómeno llamado sismonastia. Este mecanismo defensivo puede disuadir a herbívoros e insectos, y también contribuye a la reducción de la pérdida de agua al cerrar las hojas durante la noche, un movimiento conocido como nictinastia. El pulvino, una estructura en la base de las hojas, regula este movimiento al cambiar la concentración de iones, provocando un gradiente osmótico.

Aunque el movimiento es energéticamente costoso, ofrece ventajas evolutivas significativas, como la protección contra depredadores y la adaptación a diversos hábitats. La Mimosa pudica también es notable por su plasticidad, ajustando su respuesta según el entorno. Además, ha capturado el interés cultural y medicinal en sus regiones nativas, destacando su relevancia ecológica y cultural.

La Mimosa pudica: Una planta fascinante

La Mimosa pudica, conocida popularmente como la planta sensitiva o "touch-me-not", es una planta angiosperma perteneciente a la familia de las leguminosas. Originaria del Caribe y de América del Sur y Central, esta planta ha capturado la atención de botánicos y curiosos por igual debido a su capacidad única de movimiento rápido al ser tocada. Este fenómeno no solo la hace interesante desde un punto de vista biológico, sino que también plantea preguntas sobre las adaptaciones evolutivas que le permiten sobrevivir en su entorno natural.

Origen y clasificación de la Mimosa pudica

La Mimosa pudica es una planta nativa de regiones tropicales de América, principalmente del Caribe, América del Sur y América Central. Al ser una angiosperma, produce frutos que protegen sus semillas, una característica que comparte con otras plantas de la familia de las leguminosas. Su clasificación dentro de esta familia se debe a sus características morfológicas y reproductivas, que incluyen la formación de vainas que contienen sus semillas. A pesar de su origen tropical, la planta se ha extendido a otras regiones del mundo, en parte debido a su atractivo como planta ornamental y su capacidad para adaptarse a diferentes ambientes.

En la naturaleza, la Mimosa pudica se encuentra en hábitats variados, desde bosques húmedos hasta áreas más secas, lo que demuestra su capacidad de adaptación. Esta adaptabilidad ha permitido que la planta prospere en diversos ecosistemas, aunque también ha llevado a que sea considerada una especie invasora en algunas regiones donde compite con la flora local.

Características únicas de la planta sensitiva

Una de las características más notables de la Mimosa pudica es su capacidad para moverse rápidamente en respuesta a estímulos externos, un fenómeno inusual en el mundo vegetal. Al tocar sus hojas, estas se cierran de inmediato, un mecanismo que le ha valido el nombre de "planta que se duerme al tocarla". Este movimiento rápido es un ejemplo de sismonastia, un tipo de movimiento que se desencadena por estímulos mecánicos.

Mimosa
Una de las características más notables de la Mimosa pudica es su capacidad para moverse rápidamente en respuesta a estímulos externos.

Además de su movimiento, la Mimosa pudica posee hojas compuestas que pueden cambiar de orientación dependiendo de las condiciones de luz. Este tipo de movimiento, conocido como nictinastia, permite que las hojas se cierren durante la noche y se abran durante el día. Este comportamiento se cree que ayuda a la planta a minimizar la pérdida de calor y a maximizar la eficiencia fotosintética al ajustarse a los cambios en la radiación solar.

El fenómeno del movimiento en la Mimosa pudica

El movimiento de la Mimosa pudica ha fascinado a científicos y observadores durante siglos. Su capacidad para reaccionar rápidamente a estímulos externos plantea preguntas sobre los mecanismos biológicos que permiten tales respuestas y las razones evolutivas detrás de ellas.

¿Por qué se mueve la Mimosa pudica?

El movimiento de la Mimosa pudica se debe a su capacidad para detectar y responder a estímulos mecánicos y eléctricos. Cuando una hoja es tocada o sacudida, la planta inicia una serie de reacciones que resultan en el cierre de sus folíolos. Este movimiento no solo es una respuesta defensiva, sino que también puede tener otras funciones biológicas.

Una de las hipótesis más aceptadas es que este movimiento rápido actúa como un mecanismo de defensa contra herbívoros. Al cerrar sus hojas, la planta puede parecer marchita, lo que podría disuadir a los depredadores de consumirla. Además, el movimiento repentino podría asustar a insectos dañinos, que preferirían buscar presas más estáticas.

Tipos de movimientos: Nictinastia y sismonastia

La Mimosa pudica exhibe dos tipos principales de movimientos: nictinastia y sismonastia. La nictinastia es el movimiento que ocurre en respuesta a cambios en la luz. Durante el día, las hojas de la Mimosa pudica se abren para maximizar la captación de luz solar necesaria para la fotosíntesis. Por la noche, las hojas se cierran, lo que se cree que ayuda a reducir la pérdida de calor y agua.

La sismonastia, por otro lado, es el movimiento que se produce en respuesta a estímulos mecánicos, como el tacto. Este tipo de movimiento es más raro en el mundo vegetal y se observa en pocas especies, como la Venus atrapamoscas. En la Mimosa pudica, la sismonastia permite que las hojas se cierren rápidamente al ser tocadas, un mecanismo que puede servir como defensa contra depredadores.

El papel del pulvino en el movimiento

El pulvino es una estructura clave en el mecanismo de movimiento de la Mimosa pudica. Situado en la base de las hojas, este engrosamiento actúa como un punto de control que regula el movimiento de los folíolos. Cuando la planta recibe un estímulo, el pulvino inicia una serie de cambios bioquímicos que resultan en el cierre de las hojas.

La acacia mimosa
Acacia mimosa.

El pulvino responde al potencial de acción, una señal eléctrica que se genera al tocar las hojas. Esta señal provoca la expulsión de iones de potasio y cloro, y la absorción de iones de calcio, lo que genera un gradiente osmótico. Este cambio osmótico hace que el agua salga de las células del pulvino, provocando que las hojas se plieguen. Este proceso es energéticamente costoso, pero esencial para la función defensiva de la planta.

La respuesta bioquímica al estímulo

El movimiento de la Mimosa pudica es un fenómeno complejo que involucra una serie de reacciones bioquímicas. Estas reacciones no solo permiten el movimiento, sino que también tienen implicaciones para el metabolismo de la planta.

El rol de los iones en el movimiento

El movimiento de la Mimosa pudica está íntimamente ligado a la dinámica de los iones en sus células. Al recibir un estímulo, el pulvino expulsa iones de potasio y cloro, mientras que absorbe iones de calcio. Este intercambio iónico crea un gradiente osmótico que provoca la salida de agua de las células, lo que lleva al cierre de las hojas. Este mecanismo es una respuesta rápida y reversible que permite a la planta reaccionar de manera efectiva a los estímulos externos.

El papel de los iones es crucial no solo para el movimiento, sino también para mantener el equilibrio hídrico de la planta. La capacidad de regular el flujo de iones y agua permite a la Mimosa pudica ajustar su respuesta a diferentes condiciones ambientales, lo que es vital para su supervivencia en entornos cambiantes.

Costos energéticos y su impacto en la fotosíntesis

El movimiento de la Mimosa pudica, aunque fascinante, conlleva un costo energético significativo. La regulación de los iones y el movimiento del agua en las células requieren energía que la planta debe obtener de sus reservas. Este gasto energético puede tener un impacto en la fotosíntesis, ya que los recursos utilizados para el movimiento podrían haberse destinado a la producción de energía a través de este proceso.

La fotosíntesis es esencial para la supervivencia de la planta, ya que le proporciona la energía necesaria para crecer y reproducirse. Por lo tanto, la planta debe equilibrar cuidadosamente el uso de energía para el movimiento y la fotosíntesis. Esta necesidad de equilibrio puede influir en la frecuencia y la intensidad del movimiento de las hojas en respuesta a los estímulos.

Ventajas evolutivas del movimiento

El movimiento de la Mimosa pudica no solo es un fenómeno interesante desde un punto de vista biológico, sino que también ofrece varias ventajas evolutivas que han permitido a la planta prosperar en su entorno natural.

Protección frente a herbívoros e insectos

Una de las principales ventajas del movimiento de la Mimosa pudica es su capacidad para protegerse de herbívoros e insectos. Al cerrar sus hojas rápidamente al ser tocada, la planta puede parecer menos atractiva para los depredadores. Este mecanismo defensivo puede reducir el riesgo de ser consumida, aumentando así sus posibilidades de supervivencia.

Al cerrar sus hojas rápidamente al ser tocada, la planta puede parecer menos atractiva para los depredadores.

Además, el movimiento repentino puede asustar a los insectos dañinos, que podrían preferir buscar presas más estáticas. Esta capacidad de disuadir a los depredadores es una adaptación evolutiva que ha permitido a la Mimosa pudica prosperar en entornos donde la presión de los herbívoros es alta.

Reducción de la pérdida de agua

Otra ventaja del movimiento de la Mimosa pudica es su capacidad para reducir la pérdida de agua. Al cerrar sus hojas durante la noche, la planta puede minimizar la evaporación, conservando así el agua en su sistema. Esta capacidad es especialmente beneficiosa en entornos donde el agua es un recurso limitado.

La reducción de la pérdida de agua también puede ayudar a la planta a mantener su equilibrio hídrico, lo que es vital para su supervivencia. Esta adaptación le permite prosperar en una variedad de hábitats, desde bosques húmedos hasta áreas más secas, demostrando su capacidad de adaptación a diferentes condiciones ambientales.

Plasticidad y adaptación al entorno

La Mimosa pudica exhibe una notable plasticidad en su respuesta al entorno. Esta capacidad de adaptación le permite ajustar el tiempo que tarda en volver a abrir sus hojas después de un estímulo, dependiendo de la presencia de depredadores u otras condiciones ambientales. En áreas donde la presión de los herbívoros es alta, la planta puede tardar más en abrirse, mientras que en zonas cercanas a las inflorescencias, puede reabrirse más rápidamente para facilitar la polinización.

Esta plasticidad es una ventaja evolutiva significativa, ya que permite a la Mimosa pudica optimizar su comportamiento en función de las condiciones del entorno. Esta capacidad de adaptación es una de las razones por las que la planta ha tenido tanto éxito en una variedad de hábitats.

Curiosidades sobre la Mimosa pudica

Además de sus fascinantes mecanismos de movimiento, la Mimosa pudica ofrece una serie de curiosidades que la hacen aún más interesante para los amantes de la botánica.

Otras plantas que se mueven al tocarlas

Aunque la Mimosa pudica es quizás la más famosa por su capacidad de movimiento al ser tocada, no es la única planta que exhibe este comportamiento. La Venus atrapamoscas (Dionaea muscipula) es otro ejemplo de una planta que se mueve en respuesta a estímulos mecánicos. Sin embargo, a diferencia de la Mimosa pudica, la Venus atrapamoscas utiliza su movimiento para capturar presas, lo que la convierte en una planta carnívora.

Otros ejemplos de plantas que se mueven al tocarlas incluyen la planta de la oración (Maranta leuconeura) y algunas especies de helechos que cierran sus hojas en respuesta al tacto. Estas plantas, al igual que la Mimosa pudica, han desarrollado mecanismos de movimiento que les permiten interactuar con su entorno de maneras únicas.

La Mimosa pudica en su hábitat natural

En su hábitat natural, la Mimosa pudica se encuentra en una variedad de ecosistemas, desde bosques tropicales húmedos hasta áreas más secas. Esta diversidad de hábitats refleja su capacidad de adaptación y su éxito evolutivo. En estos entornos, la planta desempeña un papel importante en la ecología local, proporcionando alimento y refugio a una variedad de organismos.

La Mimosa pudica también ha sido utilizada en la medicina tradicional en algunas culturas, donde se valora por sus propiedades medicinales. Aunque su uso en la medicina moderna es limitado, su importancia cultural y ecológica sigue siendo significativa en las regiones donde es nativa.


Referencias:

Amador-Vargas, S., Dominguez, M., León, G., Maldonado, B., Murillo, J., & Vides, G. L. (2014). Leaf-folding response of a sensitive plant shows context-dependent behavioral plasticity. Plant Ecology, 215(12), 1445–1454. https://link.springer.com/article/10.1007/s11258-014-0401-4

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