El cambio climático antropogénico está cambiando nuestra forma de ver el mundo. Las olas de calor, cada vez más frecuentes, el cambio de regímenes de lluvia o las sequías hace que entornos antaño amigables, sean hoy menos atractivos, y otros antes más fríos y menos apetecibles se conviertan en lugares deseables. Esto se aplica a diferentes ámbitos, desde la misma habitabilidad de entornos naturales, hasta su uso para la agricultura, la ganadería o, también, como destino vacacional.
Efectos del cambio climático sobre los destinos vacacionales
Una serie de alteraciones asociadas al cambio climático pueden provocar que ciertos destinos vacacionales antes muy solicitados, se vuelvan poco atractivos e incluso inviables.
Zonas que tradicionalmente contaban con espacios verdes abundantes, en este tiempo pueden verse obligados a prescindir de ellos, porque no haya agua disponible suficiente para mantenerlos. Donde antes había una piscina, un campo de golf o un parque acuático, ahora es cada vez más difícil, y más costoso. En algunos lugares, incluso puede convertirse en un problema ecológico de primer orden.

Todo esto puede alterar los destinos turísticos y las preferencias de la población, dificulta la planificación de actividades al aire libre e incluso afecta a la seguridad de los viajes. Solo en España, en el año 2022, 355 personas fallecieron por golpes de calor. Una cifra que ha crecido en los últimos años, y que, si todo sigue así, seguirá aumentando.
En cuanto a las zonas costeras e insulares pueden sufrir un impacto extra, con la subida del nivel del mar, que aunque lenta y paulatina, ya se deja notar y se suma a los cambios en las corrientes marinas, que seguramente alterarán la configuración actual de las playas. Zonas de arena fina terminarán convirtiéndose en pedregales o costas escarpadas, y se pueden formar nuevas playas en lugares donde antes no estaban. Infraestructuras construidas a pie de playa sufrirán también estos efectos.
Cambios en la producción agrícola, por ejemplo, un cultivo asociado tradicionalmente a una zona determinada, deje de ser apropiado por el cambio ambiental, puede alterar la disponibilidad de ciertos recursos gastronómicos tradicionales, y afectar al turismo gastronómico. ¿Qué pasaría con el enoturismo de La Rioja, Rueda o la Ribera del Duero si el cultivo de la vid deja de ser viable en estas regiones?
El cambio climático también pone en riesgo destinos relacionados con el ecoturismo. La calidad de la experiencia de la observación de flora y fauna se ve afectada de forma evidente. Y con ello, los ingresos de las instituciones responsables de su conservación.

Considerando el cambio climático en la decisión vacacional
Afortunadamente, cada vez más personas toman conciencia del problema que representa el cambio climático. Es bien sabido que el transporte, sobre todo el aéreo, es una de las actividades con mayor impacto ambiental y que más contribuye a la emisión de gases de efecto invernadero.
En ese sentido, la población europea está bastante concienciada. Según la Encuesta sobre Clima del Banco Europeo de Inversiones realizada en 2021, hasta el 82 % de los europeos estarían dispuestos a cambiar su destino vacacional por otro que se encuentren en su país o en países vecinos, hasta un 74 % apuesta por reducir el número de viajes en avión, y un 71 % prefiere el tren antes que el avión para cualquier viaje de cinco horas de duración o menos.
Y es que, efectivamente, la elección de las vacaciones puede ser, también, una buena forma de luchar contra el cambio climático. Optar por el tren en lugar del avión o el transporte privado; una vez en destino, moverse a pie, en bicicleta o en transporte público en lugar de alquilar un coche; optar por destinos más sostenibles, y evitar actividades que impliquen la sobreexplotación de recursos son pequeñas acciones de los consumidores para aportar su granito de arena.
Referencias:
- Andrade, C. et al. 2020. Climate change projections for the Worldwide Bioclimatic Classification System in the Iberian Peninsula until 2070. International Journal of Climatology, 40(14), 5863-5886. DOI: 10.1002/joc.6553
- European Investment Bank. 2021. The EIB climate survey: the climate crisis in a COVID 19 world : calls for a green recovery. Publications Office.
- Hannah, L. et al. 2013. Climate change, wine, and conservation. Proceedings of the National Academy of Sciences, 110(17), 6907-6912. DOI: 10.1073/pnas.1210127110
- Ivanova, D. et al. 2020. Quantifying the potential for climate change mitigation of consumption options. Environmental Research Letters, 15(9), 093001. DOI: 10.1088/1748-9326/ab8589
- Stott, P. 2016. How climate change affects extreme weather events. Science, 352(6293), 1517-1518. DOI: 10.1126/science.aaf7271