Los polvos de talco no son otra cosa que un preparado que se obtiene a partir del talco, un mineral de escasa dureza formado por silicato de magnesio, es decir, Mg6(OH)4 [Si8O20]. Debido a que es muy fácil de trabajar, se ha venido utilizando desde tiempo inmemorial para esculpir figuras.
Hoy, el talco se usa, entre otras cosas, para el satinado del papel, el lubricado en seco en la industria textil, la fabricación de pinturas y en perfumería. Macerado, el talco tiene la propiedad de absorber la humedad y dejar la piel seca y suave, de ahí que se emplee en artículos de tocador. Asimismo, también se añade a casi todos los insecticidas en polvo.

El uso de los polvos de talco, efectivamente, va mucho más allá de su empleo para la piel. Es antiadherente, antiapelmazante, lubricante y blanqueante, entre otras propiedades. Incluso se usas en agricultura. Existe el talco alimentario (E553b), que es un antiaglomerante. Y en pintura se usa para mejorar la fluidez de las mezclas.
¿Por qué se considera ahora "probablemente cancerígeno"?
El órgano encargado de clasificar los productos en función de su relación con el cáncer es la Agencia Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer (IARC). Ha clasificado al talco en el Grupo 2A, "basándose en una combinación de evidencia “limitada” de cáncer en humanos, evidencia “suficiente” de cáncer en animales de experimentación y evidencia mecanicista “fuerte” en células humanas primarias y experimentales", según puede leerse en el estudio publicado. En concreto, se observaron diversos tipos de cáncer causados en ratas expuestas por inhalación, como carcinomas.
Hubo evidencia "limitada" de que el talco causa cáncer de ovario en humanos.
Se ha publicado el artículo Carcinogenicity of talc and acrylonitrile en The Lancet Oncology, que asocia no solo al talco con el cáncer, sino también a una molécula llamada acrilonitrilo. Esta sustancia está presente en la industria textil y se ha clasificado en el Grupo 1. "Hubo evidencia "suficiente" de que el acrilonitrilo causa cáncer de pulmón en humanos y evidencia "limitada" de cáncer de vejiga basada en datos de estudios ocupacionales".

Una llamada a la prudencia
A pesar de los recientes hallazgos que sugieren una posible relación entre la exposición al talco y el cáncer, es importante recordar que esta clasificación como "probablemente cancerígeno" no implica una confirmación definitiva de riesgo para todos los usuarios. La evidencia disponible proviene de estudios con limitaciones y se requiere más investigación para establecer conclusiones firmes. Mientras tanto, podría ser prudente seguir las recomendaciones de uso seguro y optar por alternativas cuando sea posible, especialmente en productos de uso perineal. La decisión sobre qué hacer es muy personal, pero debe ser informada. La comunidad científica continúa evaluando estos riesgos para proporcionar información más clara y precisa en el futuro. Como siempre, es aconsejable mantenerse informado y consultar con profesionales de la salud ante cualquier duda o preocupación.
Referencias
- Leslie T Stayner,Tania Carreón-Valencia y otros. "Carcinogenicity of talc and acrylonitrile". The Lancet Oncology. 5 de Julio de 2024