Al contrario de lo que pueda parecer, en los desiertos. ¡Es nuestro deber protegerlos!
El animal más popular del desierto es, sin lugar a duda, el camello. Este puede beber casi 180 litros de agua de una sentada para después pasar más de una semana sin probar una sola gota de agua. Además, los camellos pueden soportar largas caminatas por el desierto, razón por el que han sido empleados durante siglos como animales de carga.
Del mismo modo, en los desiertos también abundan los escorpiones. Suelen pasar la mayor parte del tiempo escondidos en la arena o bajo las piedras, acechando a otros insectos y pequeños vertebrados a los que atacar con su aguijón venenoso. Asimismo, se trata de unos animales muy solitarios. De hecho, si dos escorpiones rivales se encuentran por un mismo camino podrían llegar a matarse.
Si quieres descubrir algunas de las especies más asombrosas que habitan en el desierto, echa un vistazo a la siguiente galería. La naturaleza y la fauna silvestre nunca dejará de maravillarnos.
Gato de las arenas
El gato de las arenas (Felis margarita), que bien parece un personaje de animación, es un mamífero carnívoro adaptado para vivir en el desierto. Se encuentra al norte de África y el centro y suroeste de Asia y es el único felino que vive en un hábitat desértico arenoso. Sus orejas son grandes y de inserción baja, lo que le ayuda a protegerse de la arena que es arrastrada por el viento y también a localizar presas que se esconden bajo tierra. Cuando hace mucho calor, estos gatos se instalan en madrigueras abandonadas por zorros o roedores. Son animales activos durante el día en invierno y nocturnos durante el verano.
