Este rompedor estudio arqueológico demuestra que los fenicios desarrollaron un eficaz mortero hidráulico mucho antes de los romanos

La arqueología demuestra que los fenicios ya utilizaban el mortero hidráulico entre los siglos VIII y VI a. C.
Lagar
Recreación fantasiosa. Fuente: Midjourney/Erica Couto - Los fenicios usaron el mortero hidráulico en sus lagares, como demuestra esta investigación

Un hallazgo reciente en el yacimiento costero de Tell el-Burak, en el sur del Líbano, ha obligado a replantear una de las narrativas más extendidas sobre la historia de la construcción antigua. Hasta ahora, se asumía que la invención y el uso sistemático del mortero hidráulico —capaz de fraguar y mantener su solidez incluso en contacto con el agua— había sido una aportación fundamental de la ingeniería romana. Sin embargo, un estudio arqueométrico exhaustivo demuestra que los fenicios ya emplearon esta tecnología de manera eficaz entre finales del siglo VIII e inicios del VI a. C.

La investigación, publicada en Scientific Reports en 2025, revela que el mortero hidráulico fenicio fue el resultado de un conocimiento técnico avanzado. Su uso se integró en una estrategia productiva centralizada, orientada a sostener actividades agrícolas de alto valor económico, como la producción de vino.

Tell el-Burak
Tell el-Burak. Fuente: Tell el-Burak Archaeological Project /FreeHand 10

El contexto arqueológico de Tell el-Burak

El yacimiento de Tell el-Burak se ubica a unos nueve kilómetros al sur de Sidón. Estuvo ocupado de forma intermitente desde el Bronce medio hasta la época otomana. Su fase más activa se sitúa entre los años 725 y 350 a. C., aproximadamente, un largo período en el que operó como centro de procesamiento agrícola, quizás bajo el control de Sidón.

En el curso de las excavaciones en el sitio, se encontraron tres instalaciones enlucidas con yeso o mortero, todas ellas fechadas entre finales del siglo VIII y el siglo VI a. C. La más impresionante de ellas corresponde a un gran lagar de vino, compuesto por una amplia pila de pisado rectangular y un gran recipiente semicircular de unos 4.500 litros de capacidad para la fermentación del mosto. Las otras dos estructuras, de función menos clara, se hallaron en el sector residencial y presentan idéntica composición de enlucido. La presencia del mortero en dos tipos de ambientes en apariencia distintos sugiere que se aplicó un mismo saber técnico a diversos usos.

Qué es un mortero hidráulico y por qué es importante

El mortero hidráulico se diferencia del mortero de cal aérea en que puede endurecerse incluso en ambientes húmedos o subacuáticos. Esto se logra mezclando la cal con materiales ricos en sílice y alúmina, conocidos como materiales puzolánicos, que reaccionan químicamente con el hidróxido cálcico para formar compuestos estables y resistentes al agua.

En el caso de Tell el-Burak, los investigadores han confirmado que los fenicios incorporaban fragmentos cerámicos triturados al mortero de cal. Esta técnica aumentaba su dureza, reducía la fisuración y le confería propiedades hidráulicas e impermeabilizantes. El método, similar al opus signinum romano, apenas está documentado en el Mediterráneo antes del periodo clásico, lo que convierte este hallazgo en un ejemplo pionero en la historia de la ingeniería antigua.

Tell el-Burak
Estructuras impermeabilizadas en Tell el-Burak. Fuente: Tell el-Burak Archaeological Project

Un enfoque interdisciplinar para un hallazgo revolucionario

Los investigadores aplicaron un programa integrado de análisis. Incluyó microscopía óptica de luz polarizada, difracción de rayos X, microscopía electrónica de barrido con espectroscopía de dispersión de energía (SEM-EDS), análisis termogravimétrico y estudios de residuos orgánicos.

Los resultados confirmaron que el aglutinante se obtenía mediante la calcinación de calizas locales ricas en microfósiles. El agregado principal, además, estaba compuesto por fragmentos cerámicos procedentes, quizás, de los desechos de producción de las ánforas de la localidad de Sarepta, a unos 4 km de distancia. La presencia de bordes de reacción en las áreas de contacto entre los fragmentos cerámicos y la cal —zonas donde se formaron nuevas fases minerales de silicato cálcico y aluminato cálcico— constituye una prueba directa de la reacción hidráulica.

Por otro lado, el análisis termogravimétrico mostró un contenido de agua combinada superior al 3 % en todos los casos. Estos datos confirmarían que se trata de morteros hidráulicos y no de simples morteros de cal aérea.

Racimos de uvas
Uvas. Fuente: Pixabay

La innovación técnica: reciclaje y control de recursos

Una de las conclusiones más reveladoras del estudio es que la producción de este mortero hidráulico respondía a una elección tecnológica consciente. En la región era habitual emplear conchas trituradas como agregado, pero en Tell el-Burak se optó por la cerámica, un material menos común que debía transportarse desde un centro productor específico.

Esta necesidad de coordinación implica que debió existir una red logística y un control centralizado de recursos, probablemente gestionados por las élites sidonias, que integraban la tecnología de la construcción en la economía agrícola de exportación. El uso de residuos cerámicos de producción, además de mejorar las propiedades del mortero, también representa una forma temprana de reciclaje productivo.

El papel de la producción vinícola

La relación entre el mortero hidráulico y la producción de vino ocupa una posición central en este hallazgo. La durabilidad y la resistencia al agua del material resultaban ideales para los lagares y los depósitos de fermentación, donde el contacto prolongado con líquidos podría deteriorar otros tipos de revestimiento.

Además, el análisis químico detectó la presencia de azufre en el enlucido del lagar, ausente en las muestras de control del suelo. Los investigadores han sugereido que las trazas sulfurosas podrían vincularse al tratamiento del vino con conservantes o antifúngicos. Esto refuerza la hipótesis de que la innovación tecnológica en este cotexto se vincula directamente con la voluntad de maximizar la calidad y el volumen de la producción vinícola, un producto clave en las redes comerciales fenicias.

Microfotografías de las secciones de dos fragmentos de caliza, Tell el-Burak
Microfotografías de las secciones de dos fragmentos de caliza alterados térmicamente, tomados de la muestra SA3. Fuente: Amicone et al. 2025

Tecnologías de impermeabilización y transferencia cultural en el Mediterráneo

El estudio plantea que los fenicios pudieron ser vectores fundamentales en la transmisión de la técnica mortero hidráulico hacia el Mediterráneo occidental, mucho antes de que los romanos lo estandarizaran. Su papel como comerciantes y colonizadores les situaba en una posición privilegiada para difundir innovaciones técnicas.

Aunque aún no se dispone de pruebas directas de esta transferencia, el caso de Tell el-Burak se integra en un patrón más amplio de flujo tecnológico desde el Levante hacia el resto del Mediterráneo en la Edad del Hierro. De este flujo de conocimiento forman parte otras innovaciones fenicias como el alfabeto.

Preparación del vino en la antigüedad
Recreación fantasiosa. Fuente: Midjourney/Erica Couto

Un legado de especialización y sostenibilidad

El descubrimiento de que los fenicios de Tell el-Burak ya fabricaban mortero hidráulico obliga a revisar la cronología y la geografía de esta tecnología clave en la historia de la construcción. La investigación no solo documenta una innovación técnica avanzada para su tiempo, sino que la sitúa en el corazón de una economía agrícola y comercial altamente organizada.

Este hallazgo refuerza la imagen de que los fenicios operaron como agentes de transferencia tecnológica a lo largo y ancho del Mediterráneo y aporta un ejemplo temprano de producción sostenible basada en el reciclaje de materiales. En definitiva, Tell el-Burak demuestra que mucho antes de Roma, el conocimiento, la ingeniería y la visión estratégica ya estaban dando forma a infraestructuras capaces de resistir el paso de los siglos.

Referencias

  • Amicone, S., Orsingher, A., Cantisani, E. et al. 2025. "Innovation through recycling in Iron Age plaster technology at Tell el-Burak, Lebanon". Scientific Reports, 15: 24284. DOI: https://doi.org/10.1038/s41598-025-05844-x

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