¿Cuánto más huele un perro que un humano?
La nariz de los perros puede procesar olores entre diez mil y cien mil veces mejor que la nuestra.
Sus húmedas trufas son capaces de detectar el olor de:
- Objetos o individuos que han dejado de estar presentes, recibiendo información del pasado.
- Objetos o individuos que están por llegar, recibiendo información del futuro.
- Moléculas que segregamos cuando estamos nerviosos o estresados, captando nuestro estado de ánimo y emociones.
- Moléculas que segregamos cuando estamos enfermos, captando nuestro estado de salud.
Una nariz única en cada perro
La nariz de los perros es un órgano excepcional.
La forma y relieves de la trufa son un rasgo exclusivo en cada perro. Exactamente como la huella dactilar en las personas. Esta arquitectura nasal recibe el nombre de patrón nasal canino.
¿Cómo respiran y huelen al mismo tiempo?
La nariz de los perros, como la nuestra, debe cumplir dos funciones:
- Respirar: La forma particular de sus fosas nasales, les permite extraer parte del aire inhalado, a la vez que un nuevo flujo de aire entra con un mayor número de moléculas de olor. Es decir, con más información.
- Extraer información: Con un área cerebral dedicada al olfato mucho mayor que en humanos y un conjunto de estructuras dedicadas a extraer información olfativa, los perros son excelentes en tareas de búsqueda, detección y rastro.
Las estructuras más importantes en el olfato de los perros
Las estructuras más importantes en el sistema olfativo de los perros están representadas en la Figura 1 y son:
- Orificios o fosas nasales: la nariz de los perros se mantiene húmeda lo que facilita la captación de moléculas de olor. Además, los perros huelen en tres dimensiones: cada fosa nasal funciona de manera independiente, permitiendo al perro localizar la direccionalidad de la fuente de olor.
Cuando las fosas nasales inhalan el aire, este sigue dos caminos diferentes: uno para oler y otro para respirar. El aire exhalado en la respiración se evacua por el lateral abierto de cada fosa nasal, dejando espacio para que entre más aire. De esta manera, va aumenta la cantidad de moléculas de olor que llegan a las estructuras de detección olfativa como son las turbinas de epitelio olfativo y el órgano vomeronasal.
Los perros se reconocen por el olor
Cuando tu perro se mira al espejo por primera vez, casi con total seguridad que va a ladrar. Esto es debido a que los perros no reconocen que el perro reflejado en el espejo es él.
Sin embargo, cuando un perro olfatea su propia orina, reconoce que se trata de él, incluso cuando la orina es colocada en un lugar diferente a donde el la depositó. Esto se deduce porque ante su propia orina el perro se entretiene poco tiempo olfateando. Sin embargo, cuando su olor ha sido modificado con alguna sustancia, por ejemplo, la orina de otro perro que llegó después, el perro se entretiene mucho más tiempo recabando información.
¿Por qué unos perros tienen mejor olfato que otros?
Los estudios científicos han hallado que existen diferencias en las células del epitelio olfativo de diferentes individuos (polimorfismos). No está claro aún, si estás diferencias afectan a la funcionalidad y hacen que unos perros detecten mejor los olores que otros.
Lo que sí está claro es que razas como el Pastor Alemán o el Labrador Retriever son mejores opciones para ser dedicadas a labores de olfato, cuando los comparamos con razas como el Pekinés o el Carlino. Y esto se debe principalmente a su anatomía y salud.
La nariz de tu perro habla de su salud
Seguro que has escuchado la importancia de vigilar que la trufa o nariz de tu perro permanezca húmeda y sin agrietar. Ya que lo contrario podría, por ejemplo, indicar que tu perro tiene fiebre o está enfermo.
Particularmente, los perros que padecen braquicefalia, presentan modificaciones estructurales asociados a esta conformación craneal, que complican la tarea tanto respiratoria como olfativa. Asunto, que está muy en debate, por comprometer el bienestar animal.
Estos cambios estructurales incluyen:
- Fosas nasales muy estrechas y que dificultan el paso del aire (estenosis)
- Hipertrofia o engrosamiento de las turbinas y el epitelio olfativo
- Hipertrofia de la lengua
- Extensión del velo del paladar
Referencias:
Buzek, A. et al. 2022. The Shape of the Nasal Cavity and Adaptations to Sniffing in the Dog (Canis familiaris) Compared to Other Domesticated Mammals: A Review Article. Animals, 12(4), 517.
Horowitz, A. 2017. Smelling themselves: Dogs investigate their own odours longer when modified in an “olfactory mirror” test. Behavioural processes, 143, 17-24.