Desafiando la cumbre: esta fue la primera mujer en escalar el Everest

Junko Tabei alcanzó la cima de la montaña más alta del mundo el 16 de mayo de 1975.
Junko Tabei

“Deberías estar criando niños”. Esta fue la respuesta que recibió Junko Tabei mientras buscaba patrocinadores para una expedición al Everest. El montañismo, como tantos otros aspectos del Japón de la época, era un deporte exclusivamente para hombres. Desde que Junko se enamorara del alpinismo a los diez años, no paró de acumular rechazos y excusas machistas que le impedían llevar a cabo su pasión. Pero jamás se detuvo ante estas adversidades, fundó sus propios clubs de montaña, donde las mujeres se unían en torno a la escalada y preparaban sus propios materiales para las expediciones. Con todo en contra, Tabei subió a la cima del mundo y demostró que las mujeres también podían.

Junko Tabei fotografiada en 1985. Jaan Künnap / Wikimedia

Un deporte de hombres

Su nombre de nacimiento fue Junko Istibashi y llegó al mundo el 22 de septiembre de 1939 en Miharu, en la prefectura japonesa de Fukushima. Fue la quinta de siete hermanos y con una altura de 1,47 metros, nadie habría sospechado los logros por los que Junko pasaría a la historia. Muchos la consideraban una niña frágil y los estereotipos machistas del momento tenían a todas las mujeres por débiles. Sin embargo, Junko descubrió la pasión de su vida con apenas diez años, cuando su escuela organizó una excursión al monte Nasu, un volcán situado en el parque nacional Nikku. Disfrutó tanto la experiencia que nunca más faltó una montaña entre sus planes.

Pero el camino de Tabei hacia la cima del montañismo no fue fácil. En una época en la que las mujeres alpinistas eran consideradas una rareza, enfrentó numerosas barreras y prejuicios. La sociedad y los medios de comunicación a menudo cuestionaban su capacidad y su lugar en el mundo del montañismo. Sin embargo, Tabei se negó a dejarse intimidar y decidió convertirse en una voz para las mujeres que deseaban desafiar las convenciones y explorar su propio potencial.

Tras graduarse en Literatura inglesa por la Universidad para Mujeres Showa de Tokio, pasó por varios clubes. Su presencia en un entorno completamente masculino le llevó a situaciones desagradables, críticas y acusaciones de estar allí con otros intereses que se desviaban del montañismo. Casualmente conoció a Masanobu Tabei, un alpinista con cierto reconocimiento en Japón y se casó con él en 1965. Pero Junko Tabei demostró con creces que su interés estaba en la escalada. Subió a la cima del monte Fuji, pero sus 3776 metros de altura se le supieron a poco.

Dada las condiciones a las que tenía que hacer frente una y otra vez, Tabei fundó el Joshi-Tohan Club, compuesto únicamente por mujeres dispuestas a realizar expediciones internacionales. En 1970 llegaron a la cima del Annapurna III y a su regreso a Japón comprendió que su vida era la montaña y la aventura, no el tedio diario del trabajo y el discreto papel reservado para las mujeres de su sociedad.

Expedición al Everest

Durante cinco años se estuvo preparando física y mentalmente. Le costó conseguir los permisos necesarios por parte de las autoridades de Nepal y más difícil aún lo tuvo para reunir la financiación necesaria para su gran expedición. Sin embargo, una vez más se impuso su incansable tenacidad y la televisión japonesa aportó su patrocinio junto al diario Yomiuri Shimbun, uno de los de mayor tirada en el país. Con todo, el dinero recaudado no fue suficiente para cubrir todos los gastos y las mujeres que formaban el grupo de expedición tuvieron que poner el resto de la financiación de su bolsillo. Donde no llegó la cartera lo compensaron con trabajo y creatividad. Se confeccionaron sus propios guantes, hicieron una colecta de alimentos en conserva y fabricaron sus sacos de dormir con plumas de ganso. Una vez superados los primeros escollos, el grupo expedicionario se dispuso a conquistar el pico más alto del planeta Tierra.

Situadas en Katmandú, tomaron la misma ruta que los primeros hombres en escalar el Everest, sir Edmund Hillary y Tenzing Norgay. En la madrugada del 4 de mayo de 1975, Junko Tabei y sus compañeras ya dormían en el campo 2 de la subida cuando estuvieron a punto perder la vida:

Fuimos golpeados por una avalancha y enterrados bajo la nieve. Estaba enredada en la tienda y empujada debajo de los otros cuatro miembros del club. Comencé a sofocarme y pensé en cómo reportarían nuestro accidente. Entonces, de repente los sherpas que nos acompañaban nos rescataron. Fuimos muy afortunados de que ninguno de nosotros resultase herido, pero aun así pasaron tres días hasta que pude caminar y moverme con normalidad”.

Superado este y otros contratiempos propios de tan extrema aventura, el 16 de mayo de 1975 Junko Tabei se convirtió en la primera mujer de la historia en coronar el Everest con la ayuda de su estimado sherpa Ang Tsering. El sueño de una joven alpinista que descubrió su pasión en el volcán de su región natal se vio realizado en aquel “tatami de nieve”.

Junko Tabei en plena acción. Jaan Künnap / Wikimedia

Más allá del Everest

Su hazaña fue correspondida con la admiración que merecía, la atención por parte de innumerables medios e incluso fue felicitada por el emperador de Japón. Su empeño demostró cómo abrir las puertas que permanecían cerradas solo a las mujeres y, desde luego, su actividad como montañista no se detuvo con este hito.

No solo fue la primera mujer en escalar el Everest, también fue la primera en completar las Siete Cumbres, las montañas más altas del mundo y llegó a escalar más de 70 montañas, las más altas de cada país. En deferencia a lo lejos que llegó esta “ama de casa que escala montañas”, tal y como ella se definió, en 2019 se bautizó con su nombre una cadena montañosa de Plutón, el planeta enano que orbita más allá de Neptuno en nuestro sistema solar.

Referencias:

  • Hall, J. y Miller, M. 2023. Troubling the Silences of Adventure Legacies: Junko Tabei and the Intersectional Politics of Mountaineering. Gender, Politics and Change in Mountaineering. Global Culture and Sport Series. DOI: 10.1007/978-3-031-29945-2_3.
  • Tabei, J. 2018. Honouring High Places: The Mountain Life of Junko Tabei. Rocky Mountain Books.

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