Octubre de 1938, frente de Valencia: mientras las tropas franquistas avanzan bajo el retumbar de los cañones, una realidad menos visible pero igualmente devastadora se cierne sobre la población civil. La Guerra Civil Española, un conflicto que fracturó el país y su gente, no solo reconfiguró su mapa político y social, sino que, según revela un estudio reciente, también contrajo la estatura física de sus futuros ciudadanos. Investigadores de la Universidad de Zaragoza han descubierto que el bienestar biológico de los reclutas valencianos se vio profundamente afectado, no recuperándose hasta dos décadas después del final del conflicto. Una guerra que dejó huellas en el territorio y en la biología de una generación.

Muerte y hambre
La Guerra Civil Española (1936-1939) fue una confrontación devastadora que dividió a España, resultando en la muerte de entre 651 000 y 735 000 personas, aproximadamente el 3% de la población de 1936, y un desplome estimado del 20% del PIB nacional entre 1935 y 1940. El conflicto trajo consigo una pérdida masiva de vidas y un deterioro económico profundo, además de un retroceso significativo en las condiciones de vida de la población.
Desde una perspectiva biológica, el estrés crónico de la guerra y la subsiguiente desnutrición tienen efectos directos en el desarrollo físico humano. Durante períodos de privación alimentaria y estrés emocional, como los experimentados durante y después de la guerra, el cuerpo puede priorizar funciones vitales sobre el crecimiento, lo que resulta en una estatura reducida. Esta realidad es estudiada a través de la antropometría, que relaciona las medidas corporales, como la altura y el perímetro torácico, con el bienestar biológico y social. Así, las secuelas de la guerra se evidencian no solo en la infraestructura y la economía, sino en la propia estructura física de las generaciones siguientes.

Efectos biológicos de la guerra
Un estudio pionero realizado por Javier Puche y Francisco J. Marco-Gracia, investigadores del Departamento de Economía Aplicada de la Universidad de Zaragoza y del Instituto Agroalimentario de Aragón, ha arrojado luz sobre las profundas cicatrices biológicas dejadas por la Guerra Civil Española. Publicado en la revista Biodemography and Social Biology, el estudio analizó los registros de reclutamiento militar de 128 957 jóvenes alistados entre 1910 y 1975 de nueve municipios valencianos.
Los resultados son reveladores: durante los años críticos de la guerra (1937-1942), el porcentaje de reclutas que no alcanzaban la estatura mínima de 1,55 metros aumentó del 3,4% al 5,1%. Además, se observó una disminución promedio de 2,1 centímetros en el perímetro torácico entre los nuevos soldados de 1937 a 1943, indicativo de malnutrición y condiciones de vida precarias.
Francisco J. Marco-Gracia comentó que el estudio demuestra que el impacto de la Guerra Civil fue tan profundo que el bienestar biológico de los individuos tardó alrededor de dos décadas en volver a la tendencia de mejora que se observaba desde mediados del siglo XIX. Estos indicadores, incluyendo estatura y perímetro torácico, evidencian la inmediatez de las privaciones y su duradera huella generacional.

"¿Spain is different?"
A diferencia de otras naciones europeas que sufrieron conflictos bélicos similares, como durante las dos Guerras Mundiales, España muestra un patrón singular debido a la prolongada autarquía de Franco. Mientras países como Alemania y Francia experimentaron recuperaciones relativamente rápidas en el bienestar biológico postconflicto, en España, las políticas de autarquía prolongaron la escasez y la malnutrición durante décadas. Esto resultó en una recuperación más lenta y un impacto intergeneracional más marcado en la estatura y salud general de la población, haciendo de España un caso de estudio destacado en la investigación antropométrica sobre las consecuencias a largo plazo de los conflictos bélicos.
Entre los ecos sombríos de la Guerra Civil, los recuerdos de una niña madrileña capturan vívidamente el impacto diario del conflicto: "Todo el día soñaba con la comida. Mi madre perdió 40 kilos y mi abuelo murió de desnutrición." Sus palabras pintan un cuadro desgarrador de privaciones cotidianas. Ella y su hermana, junto con sus amigas, jugaban a recordar cómo era un buen cocido o el sabor de unos huevos, subrayando cómo, en medio del caos bélico, los anhelos más simples se convirtieron en un lujo inalcanzable. Estos relatos personales ofrecen una ventana conmovedora al sufrimiento humano detrás de las cifras y estudios.

La Guerra Civil Española, por tanto, se revela como un agente transformador de la biología humana. Las cicatrices dejadas por el conflicto se extienden más allá del tejido social hasta afectar la estatura y salud de generaciones. Este estudio nos invita a reflexionar sobre cómo los eventos históricos moldean profundamente no solo las estructuras sociales y económicas, sino también las características biológicas fundamentales de las poblaciones. Reconocer estos efectos es crucial para entender la totalidad de las consecuencias de los conflictos y para formular políticas que mitiguen sus impactos prolongados en la salud humana.
Referencias:
- Boliniaga, Í. 2009. Breve historia de la Guerra Civil Española. Nowtilus.
- Puche, J. y Marco-Gracia, F. J. 2024. Analyzing the effects of the Spanish Civil War on biological well-being through new anthropometric indicators. Biodemography and Social Biology 69 (1), 19-29. DOI: 10.1080/19485565.2024.2310499.