En 2023, un equipo de arqueólogos del Bayerisches Landesamt für Denkmalpflege (BLfD) realizó un hallazgo sin precedentes en las afueras de Lauingen, Alemania. Durante unas excavaciones rutinarias, aparecieron cinco enterramientos que, tras un minucioso análisis, resultaron ser los primeros restos humanos documentados de la Guerra de Esmalcalda (Schmalkaldischen Krieg), acaecida entre 1546 y 1547. Este conflicto, en el que el emperador Carlos V combatió contra la Liga de Esmalcalda, marcó un momento crucial en la lucha entre el catolicismo y el protestantismo en el Sacro Imperio Romano Germánico.
Lo más fascinante del hallazgo no es solo su conexión directa con la historia militar de Carlos V, sino la manera en que estos restos parecen confirmar detalles representados en un cuadro del siglo XVI. La obra en cuestión, Heerlager Karls V. bei Lauingen (El campamento de Carlos V en Lauingen), fue pintada en 1551 por Matthias Gerung y muestra con asombrosa fidelidad el emplazamiento del campamento imperial. La ubicación de las tumbas coincide exactamente con la posición del campamento retratado en la pintura, un detalle que refuerza la idea de que el arte histórico puede ser una valiosa herramienta documental.
¿Quiénes eran los caídos de Lauingen?
Los restos pertenecen a cinco hombres jóvenes, probablemente soldados del ejército imperial de Carlos V. Su análisis forense ha revelado signos de un desgaste extremo en los huesos de sus piernas, un indicio claro de que estos hombres soportaron largas marchas y un esfuerzo físico agotador. Este dato encaja perfectamente con lo que se sabe sobre la estrategia militar del emperador en la campaña del Danubio, donde las tropas se vieron forzadas a recorrer largas distancias en condiciones adversas.
Uno de los hallazgos más intrigantes fue un cierre de bota con ganchos y ojales, un objeto que también aparece en la pintura de Gerung. En la mayoría de las inhumaciones de esta época, los restos de calzado rara vez se conservan, lo que hace que esta pieza sea aún más significativa. Además, los arqueólogos encontraron cuatro pequeñas monedas de plata en una de las tumbas. Este detalle es crucial, ya que permitió fechar los entierros con precisión dentro del breve periodo del conflicto, entre octubre y noviembre de 1546.
La presencia de estas monedas es inusual, pues los entierros militares del siglo XVI rara vez incluían objetos personales. Su hallazgo plantea preguntas sobre las circunstancias de la muerte de estos soldados y la posible influencia de rituales o costumbres funerarias específicas dentro del ejército imperial.

El contexto del Schmalkaldischen Krieg y la importancia de Lauingen
El descubrimiento no solo aporta información sobre la vida de los soldados de Carlos V, sino que también refuerza la importancia de Lauingen en el desarrollo del conflicto. En el otoño de 1546, las fuerzas imperiales avanzaron desde el Rin y el Danubio, derrotando una a una las posiciones de la Liga de Esmalcalda. El 9 de octubre, Donauwörth cayó en manos del emperador, y el 13 de octubre, Lauingen se rindió sin ofrecer resistencia. Fue en este campamento donde el consejo de la ciudad rindió homenaje a Carlos V, un momento que el pintor Matthias Gerung inmortalizó en su obra.
Hasta este hallazgo, la presencia del ejército imperial en Lauingen se conocía únicamente a través de fuentes escritas y representaciones pictóricas. La confirmación arqueológica de estas sepulturas supone la primera prueba material de la presencia de las tropas imperiales en la región durante la campaña del Danubio.

Arte e historia: cómo un cuadro del siglo XVI anticipó el hallazgo
La relación entre la pintura de Gerung y el descubrimiento arqueológico es un ejemplo perfecto de cómo el arte puede servir como fuente de documentación histórica. Hasta ahora, la pintura era vista como una representación estilizada de los hechos, pero la coincidencia entre la ubicación del campamento en la obra y el lugar donde se encontraron las tumbas sugiere que el pintor pudo haber basado su obra en observaciones directas o testimonios de primera mano.
Este hallazgo ha reabierto el debate sobre el valor de las fuentes visuales como herramientas para la investigación arqueológica. A menudo, se asume que los cuadros de batallas o campamentos militares están embellecidos o exagerados para fines propagandísticos, pero en este caso, la precisión del artista ha sido sorprendente.
Además, el hecho de que se encontrara un elemento tan específico como un cierre de bota que aparece en la pintura refuerza la idea de que Gerung pudo haber captado detalles auténticos de la indumentaria y el equipo militar de la época.

Un legado que aún se estudia
Los arqueólogos del BLfD continúan analizando los restos para obtener más información sobre la identidad de los soldados, su procedencia y las condiciones en las que murieron. El descubrimiento de Lauingen es un ejemplo de cómo la arqueología puede complementar y reforzar el conocimiento histórico, ofreciendo una ventana tangible a un episodio clave de la historia europea.
Más allá de su relevancia para la historia militar, este hallazgo nos recuerda que los conflictos del pasado dejaron huellas que, siglos después, aún pueden salir a la luz. El estudio de estos restos no solo nos acerca a las vivencias de quienes combatieron en el siglo XVI, sino que también nos permite comprender mejor el desarrollo de una guerra que cambió el curso del Sacro Imperio Romano Germánico y, en última instancia, de Europa.
Referencias
- Bayerisches Landesamt für Denkmalpflege. Erstmals Bestattungen aus dem Schmalkaldischen Krieg entdeckt [comunicado de prensa]. Lauingen: BLfD. Consultado el 19 de marzo de 2025