Las nuevas especies exóticas invasoras que podrían amenazar la biodiversidad en España

De las 44 especies que componen la familia de los herpéstidos, solo una se libra de su inclusión en el Catálogo.
Una manada de suricatos

Las especies exóticas invasoras representan un problema creciente. Cada país regula por ley las especies que considera invasoras. En España, la regulación tiene dos niveles: el europeo, a través de la Lista de especies exóticas preocupantes para la Unión, y el nacional, regulado por el Real Decreto 630/2013, y que establece el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras.

Este catálogo, gestionado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, se va actualizando cada cierto tiempo a través de órdenes ministeriales, que se nutren de solicitudes de carácter público, y que son evaluadas por un Comité Científico, en función de las pruebas científicas disponibles, cuya decisión generalmente es aplicada —aunque no siempre—.

La última actualización del Catálogo fue la Orden TED/330/2023, publicada en el Boletín Oficial del Estado el 7 de abril, e incluye una especie de plantas, cuatro insectos, un pez, y toda una familia de mamíferos: los herpéstidos (Herpestidae).

Una manada de suricatos. -Kamil Suchta/iStock - Kamil Suchta

¿Qué son los herpéstidos?

Los herpéstidos son una familia de mamíferos carnívoros que habita en África, Asia y Europa. El grupo abarca un total de 14 géneros, 13 de ellos íntegramente africanos, y hasta 34 especies conocidas. Algunas especies son solitarias y otras forman manadas que pueden llegar a ser muy numerosas. Su tamaño corporal varía entre los 20 y los 75 cm, y pueden pesar entre 1 y 6 kg.

Hasta 25 especies reciben nombres vernáculos con la designación de ‘mangosta’: la colipeluda, la enana, la rayada, la rufa… Aparte, encontramos el cusimanse, con cuatro especies del género Crossarchus, el meloncillo, con otras cuatro del género Herpestes, y el suricato (Suricatta suricatta).

Los herpéstidos son depredadores, y se alimentan de una gran variedad de presas: insectos, crustáceos, roedores, aves, huevos y reptiles, además de carroña. Su capacidad para cazar serpientes venenosas, como cobras o víboras, es casi legendaria. Su éxito radica en unos reflejos excelentes y la rápida velocidad de reacción, pero contrariamente a lo que se suele pensar, no son inmunes al veneno.

Gracias a esta capacidad para cazar roedores y serpientes, los herpéstidos, y más concretamente, el meloncillo chico (Herpestes auropunctatus) se han tratado de aprovechar como método de control biológico. Sin embargo, no resulta muy eficaz: con un abanico tan amplio de presas potenciales, habitualmente elige animales menos peligrosos, y solo caza serpientes cuando no tienen otras opciones. Respecto a las ratas, son animales inteligentes que suelen aprender a evitar depredadores. Pero además, el meloncillo chico se reproduce con relativa facilidad, aclimatándose rápidamente a distintos entornos, y hallando presas que cazar. Eso es lo que le convierte en especie invasora.

Mangosta cazando una cobra. - Mieke Suharini/iStock

¿Qué herpéstidos se incluyen en el Catálogo?

La mayor parte de los herpéstidos comparten estos rasgos de especie invasora. Allí donde se ha introducido para el control biológico, se ha asentado con facilidad, estableciendo poblaciones reproductoras, y ha provocado impactos importantes sobre la biodiversidad. En algunos entornos ha provocado el declive y la extinción local de numerosas especies de vertebrados nativos, sobre todo en ambientes insulares, más sensibles a este tipo de impacto. Se han registrado invasiones de herpéstidos en Japón, Indonesia, Bosnia-Herzegovina, Croacia, Montenegro, Florida, gran parte de los países insulares y costeros del Caribe, Colombia, las Guayanas, Surinam, y las islas Fiji y Tonga.

La inclusión de especies en el Catálogo no siempre tiene que ver con que la especie muestre ya un comportamiento invasor en España. La legislación contempla la inclusión preventiva de especies que, sin haber sido introducidas, serían un peligro significativo si se hiciera. Esto es lo que sucede con los herpéstidos. Aunque actualmente no existen registros de la introducción masiva de herpéstidos en España, desde hace unos años se ha popularizado la introducción de suricatos y mangostas como mascotas exóticas.

En realidad, no son buenas mascotas: son animales salvajes, no domesticados, que pueden llegar a ser un peligro para su propietario. Un factor que incrementa el riesgo de fuga o de liberación deliberada al medio, con el riesgo de expansión que implica. Por ese motivo, como medida preventiva de futuras invasiones, el Comité Científico ha recomendado incluir en el Catálogo todas las especies exóticas de la familia Herpestidae.

Lo que suma, en total, 33 especies. Todas, menos una.

Meloncillo común, la única especie de herpéstido excluida del Catálogo. - Jeff Kingma/iStock

El único herpéstido que se libra: el meloncillo común

La única especie de herpéstido que no ha sido incluida en el Catálogo es el meloncillo común (Herpestes ichneumon), también conocido como meloncillo egipcio. Su distribución geográfica se extiende por la mayor parte del África tropical y el tercio oriental del continente. También hay poblaciones en el sur de Turquía, y en el cuadrante sudoccidental de la península ibérica. De hecho, es la única especie de herpéstido con poblaciones nativas en Europa.

En la península ibérica se distribuye sobre todo por la comunidad portuguesa de Algarve, y en el sur de España, principalmente Sierra Morena, el espacio de Doñana y las serranías de Málaga y de Cádiz.

Su presencia en España fue siempre objeto de discusión: debido a que no se encuentran fósiles de meloncillos en Europa, se pensó que pudo haber sido introducido por los fenicios o por los romanos. Sin embargo, los estudios biogeográficos, llevados a cabo por Phillipe Gaubert y colaboradores, publicados en la revista Jorunal of Biogeography, demuestran que el meloncillo ibérico tienen conexión con las poblaciones africanas a través del Sahara, y lo más probable es que atravesaran el estrecho de Gibraltar durante las fluctuaciones del nivel del mar consecuencia de las glaciaciones del Pleistoceno, hace decenas de miles de años.

Referencias:

  • BOE. 2013. Real Decreto 630/2013, de 2 de agosto, por el que se regula el Catálogo español de especies exóticas invasoras. BOE, 185(Sec. I.), 56764-56786.
  • Gaubert, P. et al. 2011. Comparative phylogeography of two African carnivorans presumably introduced into Europe: disentangling natural versus human-mediated dispersal across the Strait of Gibraltar. Journal of Biogeography, 38(2), 341-358. DOI: 10.1111/j.1365-2699.2010.02406.x
  • Orden TED/339/2023, de 30 de marzo, por la que se modifica el anexo del Real Decreto 139/2011, de 4 de febrero, para el desarrollo del Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial y del Catálogo Español de Especies Amenazadas, y el anexo del Real Decreto 630/2013, de 2 de agosto, por el que se regula el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras., n.o Orden TED/339/2023, 83 50910 (2023)
  • Roy, S. 2016. Herpestes auropunctatus (small Indian mongoose). CABI Compendium, CABI Compendium, 80508. DOI: 10.1079/cabicompendium.80508
  • Vaughan, T. A. et al. 2011. Mammalogy (5th ed). Jones and Bartlett Publishers.

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