La belleza de la naturaleza también contiene peligros. La naturaleza no siempre es un lugar seguro pero, sin duda, siempre será fascinante. Desde lagos a laberintos submarinos, acompáñanos en este viaje por estas arriesgadas aguas.

Los lagos más peligrosos
Lago Natron, Tanzania
Es uno de los lagos más salados y alcalinos del mundo. De hecho, es un lago muy famoso por ser extremadamente alcalino, con un nivel de pH de 10,5, lo que lo hace letal para la mayoría de las formas de vida. Es prácticamente inhabitable. Es un lugar tan intenso que si un animal entra en el agua sin querer, muere calcificado. Sus aguas están a unos 50 ºC. Apenas unas pocas especies de bacterias y algas pueden sobrevivir en estas aguas tan amenazadoras.
Lago Nyos, Camerún
También conocido como lago Lwi, el lago Nyos es un lago de cráter que se asienta sobre una bolsa de magma. Es un lago explosivo. En 1986, una liberación masiva de dióxido de carbono del lago provocó la muerte de 1.746 personas por asfixia y 3.500 cabezas de ganado en las aldeas cercanas. Solo seis personas lograron salvarse de tal explosión de CO2 que, según los científicos, fue provocada por un deslizamiento de tierra.

Lago Boiling, República Dominicana
Nos desplazamos hasta República Dominicana para conocer otro de los lagos más peligrosos del mundo. Las aguas de este lago, tal y como su propio nombre indica (boiling = hirviente), están en constante ebullición debido al calor de un volcán cercano, por lo que logran alcanzar temperaturas de hasta 90 ºC. Y eso sin contar el centro del lago. No es posible medir la temperatura del centro del lago, ya que al estar continuamente hirviendo, es muy peligroso acercarse. Cualquier cosa que entra en estas aguas, hierve instantáneamente, de ahí que esté totalmente prohibido entrar a este lago de la República Dominicana.
Lago Karachay, Rusia
Ubicado en el sur de los Montes Urales en el este de Rusia, el lago Karachay ha sido descrito como uno de los lugares más contaminados del mundo debido a que sus aguas y las áreas circundantes están altamente contaminadas con algo tan llamativo como los desechos radiactivos. Durante la era soviética se vertieron, desde Mayak, una de las fábricas de armas más importantes de Rusia, numerosos desechos nucleares lo que, unido al desastre de Chernóbil, hicieron de sus aguas un caldo de cultivo a las enfermedades por radiación. Muchos residentes de la zona sufrieron unas altas tasas de cáncer y discapacidad congénita a causa de estos vertidos. Actualmente, las aguas siguen siendo muy radiactivas.

Pozo de Jacob, Texas
Parece un lugar perfecto en el que zambullirse, ¿verdad? Este pozo natural de 9 metros de largo y 3,6 metros de ancho alimentado por agua de manantial increíblemente cristalina ha sido muy popular para los habitantes de Texas durante los sofocantes meses de verano. Sin embargo, aquí las aguas no representan en sí mismo un peligro salvo que casi una decena de personas han muerto después de sumergirse demasiado profundo y no poder regresar a la superficie a tiempo. Su peligro reside en lo atractivo que resulta este lugar para los buceadores. El pozo conduce a una caverna principal de más 1.300 metros de profundidad lo que hace necesario un suministro de oxígeno considerable para adentrarse en sus aguas con seguridad.
Río Tinto
Como bonus, este rincón de España bien se merece un hueco entre las aguas más peligrosas del planeta. Lo primero que ves cuando te acercas es un cuerpo de agua teñido de rojo sangre. ¿Por qué? A causa de miles de años de contaminación minera (el mismo río es rico en metales pesados como el oro y la plata), el río se transformó en un ambiente extremo, adquiriendo su particular color rojizo y criando organismos quimiolitotróficos como bacterias oxidantes de hierro y bacterias oxidantes de azufre. Destaca entre los lugares más ácidos. Su pH es de 1.7 a 2.5.