Son muchos los factores que afectan de forma directa a los seres vivos: el cambio climático, las especies invasoras, la destrucción del hábitat, la contaminación… En la carrera constante contra la extinción, la biodiversidad de nuestro planeta enfrenta retos enormes. España, con su gran variedad de ecosistemas terrestres y marinos, es hogar de numerosas especies que actualmente luchan por su supervivencia. La preservación de estas especies es fundamental por su valor intrínseco y también por el papel que desempeñan en sus respectivos hábitats y ecosistemas. Estas especies en peligro crítico representan un recordatorio permanente de la fragilidad de la naturaleza, así como de nuestra responsabilidad colectiva en su protección y conservación.

Foca monje mediterránea
La foca monje mediterránea (Monachus monachus) es una de las focas más amenazadas del mundo, en situación de peligro crítico de extinción. Este mamífero marino es nativo de la región del Mediterráneo y partes del Atlántico norte, incluyendo las costas de España. A pesar de que históricamente tuvo una amplia distribución, su población ha disminuido drásticamente.
Según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), la población actual de la foca monje se estima entre 350 y 450 individuos maduros, con una tendencia poblacional decreciente. Los riesgos para su conservación son múltiples. El hábitat de la foca monje se ha visto significativamente reducido y fragmentado debido al desarrollo residencial y comercial, la puesta en marcha de actividades recreativas en su área y la contaminación. Actualmente, la especie sobrevive en pequeñas poblaciones aisladas.
Esta especie se enfrenta a amenazas directas como la captura accidental en artes de pesca, la caza ilegal y la contaminación marina. La conservación efectiva de la foca monje requiere esfuerzos urgentes y coordinados para proteger su hábitat, implementar medidas de gestión para reducir las capturas accidentales y promover la concienciación sobre su estado crítico. Las acciones de conservación in situ, como la protección de áreas críticas de reproducción y descanso, son esenciales para la supervivencia de esta emblemática especie.

Tritón de Montseny
El tritón de Montseny (Calotriton arnoldi) es una especie endémica de un área muy limitada en el Parque Natural del Montseny, en Cataluña, España. Catalogado por la UICN como ‘en peligro crítico’, esta especie representa un claro ejemplo de la vulnerabilidad de la biodiversidad en áreas reducidas. La población actual del Tritón de Montseny se estima entre 1000 y 1500 individuos maduros, con una tendencia poblacional decreciente. Su hábitat natural se reduce a humedales forestales y corrientes de agua dulce.
Los mayores riesgos para su conservación se relacionan con la modificación de su hábitat natural por la explotación forestal y la gestión del agua, como la construcción de presas, los trasvases y el uso del agua para la agricultura. Estas actividades han supuesto la reducción y fragmentación de su hábitat, poniendo en peligro la supervivencia de esta especie. Otras amenazas involucran la competencia y depredación por especies invasoras y los efectos del cambio climático, como las alteraciones del hábitat y los periodos de sequía.
La conservación del Tritón de Montseny requiere esfuerzos coordinados en cuanto a proteger y restaurar su hábitat, controlar las especies invasoras y mitigar los impactos del cambio climático. La especie se beneficia actualmente de medidas de conservación in situ, que incluyen la protección de su hábitat en el Parque Natural del Montseny, y programas ex situ de cría en cautividad para aumentar su población.

Dragoncillo del cabo de Gata
Pasando de animales a plantas, hay un grupo que despierta la curiosidad por la forma peculiar de su flor. Se trata del género Antirrhinum, cuya flor es conocida como ‘boca de dragón’, un nombre bien merecido.
Aparte de las variedades más populares de jardinería, existen otras especies silvestres en grave peligro, una de ellas es el dragoncillo del cabo de Gata (Antirrhinum charidemi), una especie endémica de la Sierra de Cabo de Gata en Almería, España, que crece entre 70 y 430 metros de altitud sobre el nivel del mar.
Clasificada como "en peligro crítico" por la UICN, su distribución es altamente restringida, con un área de ocupación de solo 33 km². La especie ha experimentado una tendencia regresiva en su rango de distribución y tamaño poblacional, con una población estimada de 22 600 individuos. Las amenazas principales para su supervivencia tienen que ver con el pastoreo de cabras y la pérdida de polinizadores naturales debido, especialmente, al incremento de la apicultura en la zona.
Las acciones de conservación recomendadas para esta especie van encaminadas al establecimiento de áreas de exclusión de especies de pastoreo y la restricción de actividades de apicultura en las áreas circundantes de su distribución. Además, se enfatiza la necesidad de investigación adicional sobre su ecología y el seguimiento de las tendencias poblacionales para informar y guiar las estrategias de conservación.

Escobilla de Masca
Perteneciente a la familia de las santaláceas, la misma a la que pertenece el muérdago, la escobilla de Masca (Thesium psilotocladum) es una planta arbustiva, de hasta un metro de altura, que crece de forma natural en barrancos, repisas y roquedos calizos del extremo occidental de la isla de Tenerife, de donde es endémica. No es raro que en el archipiélago canario haya muchas especies en peligro de extinción: los ecosistemas insulares son más sensibles a las perturbaciones, las poblaciones de especies que allí viven son genéticamente más homogéneas y, al estar rodeadas por el océano, es más probable que surjan endemismos.
Aunque la UICN califica la escobilla de Masca como ‘en peligro crítico de extinción’, lo cierto es que su conservación es incierta desde el último avistamiento de dos ejemplares, en el barranco de Masca, en 1983. Para algunos investigadores, la especie está extinta, otros creen que aún puede haber semillas viables de esta planta, en el suelo. Además, dado que crece en lugares de difícil acceso, no se puede descartar que aún existan ejemplares vivos en algún lugar recóndito y desconocido.
Dos causas principales han llevado a esta especie a una situación tan desesperada, ambas de origen humano. Por un lado, el pastoreo nómada, sobre todo de cabra. Las cabras, escaladoras hábiles, son capaces de llegar a los riscos y laderas para otros muchos inaccesibles, y comer las plantas que allí crecen. Por otro lado, la entrada de especies invasoras, especialmente el conejo, depredador natural de las plantas de roquedo.

Grillo de matorral de Gran Canaria
Sin salir de las Islas Canarias, encontramos otra especie en peligro crítico de extinción: el grillo de matorral de Gran Canaria (Evergoderes cabrerai). Nativo del cuadrante noroccidental de la isla de Gran Canaria, se encuentra en una situación muy similar a la de la escobilla de Masca. Su última observación confirmada data de mediados de la década de 1960, específicamente en el Barranco de Agaete, a una elevación de entre 300 y 400 metros sobre el nivel del mar, y actualmente no hay garantía de que la especie continúe con vida.
No obstante, en 2018 se informó de un posible avistamiento por parte de Lukas Knob, Lisa Mahla y Jann Kolmsee, entonces estudiantes Erasmus en el Instituto de Productos Naturales y Agrobiología (IPNA-CSIC). La UICN es optimista, y califica la especie como ‘en peligro crítico de extinción’.
Los riesgos para la conservación de esta especie son diversos y, en muchos casos, desconocidos debido a la falta de avistamientos recientes y estudios detallados. Sin embargo, se considera que factores como el cambio en el uso del suelo, el desarrollo rural y la urbanización pueden haber contribuido a su declive. Además, la frecuencia creciente de incendios forestales y deslizamientos de tierra en su hábitat potencial podrían haber afectado negativamente a la especie.
Se necesita una búsqueda intensiva para determinar si Evergoderes cabrerai aún sobrevive en pequeñas áreas del barranco y, si así fuera, será crucial estudiar su ecología para aplicar medidas efectivas de gestión del hábitat.
Referencias:
- Aguilar, A. et al. 2010. Monachus monachus (Mediterranean Monk Seal). The IUCN Red List of Threatened Species, 2010(4), e.T13653A4305567. DOI: 10.2305/IUCN.UK.2010-4.RLTS.T13653A4305567.en
- Cueto, M. et al. 2011a. Antirrhinum charidemi. The IUCN Red List of Threatened Species, 2011(1), e.T165205A5989964. DOI: 10.2305/IUCN.UK.2011-1.RLTS.T165205A5989964.en
- Cueto, M. et al. 2011b. Kunkeliella psilotoclada (Escobilla de Masca). The IUCN Red List of Threatened Species, 2011(1), e.T165205A5989964. DOI: 10.2305/IUCN.UK.2011-1.RLTS.T165205A5989964.en
- Hochkirch, A. 2016. Evergoderes cabrerai. The IUCN Red List of Threatened Species, 2016(3), e.T16895307A74539280. DOI: 10.2305/IUCN.UK.2016-3.RLTS.T16895307A74539280.en
- Instituto de Productos Naturales y Agrobiología. 2018. Estudiantes Erasmus en el IPNA-CSIC redescubren una especie que se pensaba extinta.
- IUCN SSC Amphibian Specialist Group. 2022. Calotriton arnoldi (Montseny Brook Newt). The IUCN Red List of Threatened Species, 2022, e.T59440A79801791. DOI: 10.2305/IUCN.UK.2022-1.RLTS.T59440A79801791.en