Desde hace años la Realidad Aumentada se presenta como una herramienta para acortar las barreras físicas, permitiendo a las personas compartir experiencias como si estuvieran en el mismo espacio. Algo parecido a lo que vemos en las salas de reuniones de los Jedi en Star Wars, pero menos sofisticado, de momento.
Pero vamos a darle algo de contexto antes de entrar en materia.
La historia de la RA se remonta a las primeras décadas del siglo XX, con los primeros experimentos en cine y televisión que buscaban añadir gráficos y efectos especiales a las imágenes reales. Sin embargo, no fue hasta la década de 1990 que la RA comenzó a tomar forma como la conocemos hoy, con investigadores en laboratorios de computación desarrollando los primeros sistemas que permitían superponer imágenes virtuales en el mundo real.
En el ámbito de la comunicación, la RA ha evolucionado significativamente. Inicialmente, se utilizaba en entornos profesionales y militares para entrenamientos y simulaciones. Con la presencia de móviles con cámaras avanzadas y sensores de movimiento, la RA se hizo accesible al gran público. Aplicaciones como Snapchat, por ejemplo, aprovechan constantemente la RA para crear filtros que modifican la imagen de los usuarios en tiempo real, una forma lúdica de comunicación visual.
El caso es que la RA ha transformado la manera en que las personas en relaciones a distancia interactúan, ofreciendo desde simples juegos compartidos hasta experiencias más profundas, como tours virtuales conjuntos y actividades cotidianas compartidas en tiempo real. Estas experiencias han ayudado a las parejas a mantener un sentido de cercanía y conexión, a pesar de la distancia física.
A medida que la tecnología avanza, la RA se está convirtiendo en una herramienta cada vez más sofisticada para la comunicación a distancia. Cada día, las experiencias de RA se vuelven más personalizadas y reactivas, proporcionando una interacción casi palpable que promete revolucionar las relaciones a distancia, haciéndolas más ricas y multisensoriales.

Evolución de la RA en el contexto de las relaciones a distancia
Todos sabemos que la comunicación a distancia ha experimentado una evolución notable en las últimas décadas, transformándose a través de la innovación tecnológica y adaptándose a las necesidades cambiantes de la sociedad. La Realidad Aumentada (RA) una de las últimas tendencias, pero prestemos atención a la evolución en el mundo de las relaciones a distancia:
- Década de 1990: La comunicación a distancia era dominada por el correo electrónico y los primeros servicios de mensajería instantánea. Estas herramientas digitales comenzaron a reemplazar a las cartas y llamadas telefónicas como medios principales de mantener el contacto a larga distancia.
- Principios de los 2000: Con la llegada de los teléfonos móviles, los mensajes de texto SMS se convirtieron en una forma rápida y personal de comunicación. Aunque limitados en contenido, ofrecían una conexión instantánea.
- Mediados de los 2000: La proliferación de smartphones y el acceso a internet de alta velocidad dieron paso a aplicaciones de mensajería más avanzadas, que incluían la capacidad de compartir imágenes y videos, enriqueciendo la experiencia comunicativa.
- Finales de los 2000 y principios de los 2010: Las redes sociales y las aplicaciones de videollamadas comenzaron a permitir interacciones más ricas y en tiempo real, acortando aún más la distancia emocional entre las personas.
- Mediados de los 2010: La RA entra en escena con aplicaciones que permiten a los usuarios interactuar con elementos virtuales superpuestos en el mundo real. Juegos como Pokémon GO demostraron el potencial de la RA, dando visibilidad a esta tecnología en todo el mundo.
- Finales de los 2010 a la actualidad: Las aplicaciones de RA se han vuelto más sofisticadas, permitiendo no solo juegos, sino también experiencias compartidas como visitas virtuales a museos, asistencia a eventos en vivo y la posibilidad de proyectar avatares realistas en el espacio de cada uno, proporcionando una sensación de presencia física.
Las estadísticas actuales indican que la adopción de la RA está en aumento. Según un informe de Statista, se espera que el número de usuarios móviles de RA alcance los 1.730 millones para 2024, lo que demuestra un crecimiento significativo desde los aproximadamente 200 millones en 2015.
En el contexto de las relaciones a distancia, la RA está empezando a ser vista no solo como una novedad, sino como una herramienta esencial para mantener la conexión. Las tendencias muestran que las aplicaciones de RA están siendo cada vez más utilizadas para compartir experiencias como si las parejas o amigos estuvieran juntos en el mismo lugar. Por ejemplo, las aplicaciones que permiten a las personas ver películas juntas o explorar nuevos destinos turísticos en tiempo real están ganando popularidad, como os comentaré más adelante.
Tecnologías de RA aplicadas a las relaciones a distancia
Veamos ahora algunas de las plataformas y aplicaciones emergentes, así como casos de uso que ilustran cómo la RA está redefiniendo la comunicación interpersonal.
Por un lado tenemos plataformas como Snapchat, que comenté al principio, que permiten a los usuarios enviar mensajes con elementos virtuales superpuestos, como máscaras y efectos especiales que reaccionan en tiempo real a los movimientos faciales y el entorno.
Por otro lado existen plataformas como Spatial permiten a los usuarios crear avatares y participar en reuniones y eventos en un espacio de RA compartido. Muchas veces el escenario es completamente virtual, por lo que pasaríamos de Realidad Aumentada a Realidad Virtual, aunque en otras ocasiones puede haber elementos reales en la proyección, encajando mejor en el concepto de RA.
Los dispositivos que hacen esto posible pueden ser desde simples móviles a gafas de realidad mixta o incluso virtual, como las Microsoft HoloLens y las Magic Leap One, que están llevando la RA a un nivel más avanzado, permitiendo a los usuarios ver e interactuar con hologramas tridimensionales en su entorno inmediato. Estos dispositivos están comenzando a ser utilizados para compartir experiencias en tiempo real, como cocinar juntos o realizar actividades recreativas.
Las gafas como Google Glass no tuvieron el éxito que merecían, pero representaban una idea que vuelve con frecuencia al mercado: usar gafas aparentemente normales para ver contenido digital por encima del real.
Ejemplos de cómo la RA podría cambiar la comunicación interpersonal
Ya conocemos las tecnologías que lo hacen posible, veamos ahora algunos ejemplos que podrían ser reales durante los próximos años:
- Turismo virtual compartido: las aplicaciones de RA pueden permitir a las personas realizar tours virtuales por ciudades y museos, proporcionando una experiencia compartida que puede ser disfrutada simultáneamente, a pesar de estar en diferentes ubicaciones geográficas. Para ello podríamos usar gafas para proyectar la figura de la otra persona mientras caminamos por un recinto.
- Educación y aprendizaje conjunto: la RA se utiliza para crear entornos de aprendizaje compartidos, donde las personas pueden estudiar y aprender juntas. Por ejemplo, una aplicación de RA puede proyectar un modelo anatómico en 3D en el espacio de cada usuario, permitiendo que una pareja explore el modelo juntos mientras se encuentran en diferentes lugares.
- Compras y decisiones conjuntas: las aplicaciones de RA podrían transformar la experiencia de compra a distancia, permitiendo a las parejas o amigos probar y visualizar productos en su espacio real, como muebles o decoración del hogar, facilitando la toma de decisiones conjuntas en tiempo real.
- Soporte y asistencia remota: en situaciones donde una persona necesita asistencia o guía para realizar una tarea, la RA permite a un usuario remoto superponer indicaciones y anotaciones en el campo de visión del usuario local, como si estuviera allí para ayudar.
- Experiencias compartidas personalizadas: las aplicaciones de RA pueden personalizar las experiencias compartidas basándose en la historia y preferencias de la relación. Por ejemplo, una pareja podría celebrar un aniversario proyectando recuerdos digitales, como fotos y videos, en las paredes de su hogar.
Son solo unos ejemplos, pero ya ilustran cómo la RA podría enriquecer las relaciones a distancia, proporcionando una sensación de presencia y participación que antes era difícil de lograr. Durante los próximos años es probable que veamos aún más aplicaciones innovadoras que continúen transformando la comunicación interpersonal en el ámbito digital.
Impacto emocional y psicológico
Por último, es importante hablar de un tema que está siendo cada vez más estudiado: el impacto de este tipo de tecnología en el ámbito emocional y psicológico de las relaciones a distancia.
Por un lado, es cierto que la capacidad de la RA para superponer elementos digitales en el entorno físico ha abierto nuevas vías para la conexión emocional y la presencia compartida, pero algunos estudios académicos han comenzado a explorar con más detalle cómo la RA puede afectar las relaciones interpersonales.
Un estudio publicado en la revista Computers in Human Behavior sugiere que la RA puede mejorar la calidad de la comunicación al permitir que las interacciones sean más expresivas y personalizadas, ya que añade una capa de profundidad a las interacciones que los medios de comunicación tradicionales no pueden replicar, como la capacidad de compartir experiencias en tiempo real y de manera más inmersiva.
Otras investigaciones aseguran que la RA puede aumentar la sensación de presencia de una persona, lo que es crucial para mantener la intimidad en las relaciones a distancia, sin embargo, su integración en la vida cotidiana no está exenta de desafíos y dilemas éticos, especialmente en lo que respecta a la privacidad, la seguridad y la dependencia tecnológica.
Mientras que la RA puede mejorar la comunicación, también existe el peligro de que las personas puedan preferir las interacciones mejoradas por RA sobre las interacciones cara a cara, lo que podría llevar a un deterioro de las habilidades sociales y la desconexión del mundo físico.
Para abordar estos desafíos, es esencial que los desarrolladores, legisladores y usuarios trabajen juntos para establecer prácticas y normativas que protejan la privacidad y promuevan un uso ético y consciente de la RA. La educación y la conciencia sobre el uso responsable de la tecnología son fundamentales para asegurar que la RA sirva como una herramienta que mejore, y no disminuya, la calidad de nuestras relaciones humanas.
Referencias:
- Proxemics for Human-Agent Interaction in Augmented Reality - CHI '22: Proceedings of the 2022 CHI Conference on Human Factors in Computing Systems. April 2022. Article No.: 421. Pages 1–13 https://doi.org/10.1145/3491102.3517593
- Do VR and AR versions of an immersive cultural experience engender different user experiences? https://doi.org/10.1016/j.chb.2021.106951