Bajo las sombras del antiguo Taposiris Magna, un descubrimiento arqueológico reciente ha generado un intenso debate entre expertos: una estatua de mármol blanco, que algunos creen podría representar a Cleopatra VII, la última reina de Egipto. Este hallazgo, anunciado por el Ministerio de Turismo y Antigüedades de Egipto en una nota oficial publicada en Facebook, arroja nueva luz sobre la importancia histórica de este sitio cercano a Alejandría, vinculado a la legendaria dinastía ptolemaica.
La estatua, encontrada junto a otros objetos fascinantes como un amuleto dedicado al dios Ra y monedas con el rostro de Cleopatra, refuerza la relevancia de Taposiris Magna como epicentro cultural y político de la época. Pero, como en toda buena historia, este descubrimiento no está exento de polémica.
Un busto envuelto en misterio
La figura en mármol blanco representa a una mujer con un tocado real, el distintivo "diadema", que fue un símbolo de poder en la época ptolemaica. Kathleen Martínez, arqueóloga dominicana que lidera el equipo egipcio-dominicano, no duda en afirmar que este busto es el retrato de Cleopatra VII. Según su análisis, los rasgos y el contexto del hallazgo coinciden con los elementos típicos de la reina que gobernó Egipto en sus años finales de independencia.
Sin embargo, no todos los expertos comparten su entusiasmo. El reconocido arqueólogo Zahi Hawass ha expresado dudas importantes: “Observé el busto con atención. No es Cleopatra en absoluto; es romano”. Este desacuerdo ha llevado a especular que la figura podría representar a una princesa romana o a una noble de alta posición, pero no a la legendaria Cleopatra.

Además, el hallazgo se contextualiza en una colección que incluye 337 monedas grabadas con el rostro de la reina, lo que, según Martínez, refuerza su hipótesis. Aun así, los críticos señalan que las monedas fueron ampliamente utilizadas y distribuidas, y no necesariamente prueban que el busto sea de la última gobernante de Egipto.
Los secretos del Taposiris Magna
El complejo Taposiris Magna, donde tuvo lugar el descubrimiento, se remonta a alrededor del 280 a.C. y ha sido un lugar clave para investigaciones arqueológicas. Fundado durante el periodo helenístico, este templo dedicado a Osiris e Isis ofrece una ventana al sincretismo religioso entre las culturas griega y egipcia.

Entre los hallazgos más llamativos, además del busto de mármol, se encuentran una estatua de un faraón con el tradicional tocado "nemes", lámparas de aceite decoradas, un anillo de bronce en honor a la diosa Hathor, y un amuleto con la inscripción “La justicia de Ra ha surgido”. Estos objetos, hallados en un depósito ceremonial, parecen estar vinculados al inicio de la construcción de alguna estructura importante dentro del recinto.
Los arqueólogos también encontraron túneles conectados al Mediterráneo y una necrópolis con al menos 20 tumbas, lo que subraya la magnitud y el valor histórico del sitio. Las exploraciones submarinas en las zonas sumergidas de Taposiris Magna han añadido más capas de intriga, con la recuperación de restos humanos, cerámica y estructuras antiguas.

¿Un paso más cerca del legado de Cleopatra?
La búsqueda de la tumba de Cleopatra VII y Marco Antonio ha sido el motor de las excavaciones en Taposiris Magna durante más de una década. Martínez ha sugerido en varias ocasiones que el lugar podría ser el sitio de enterramiento de la famosa pareja, una teoría que continúa despertando el interés global. Aunque aún no se ha encontrado evidencia directa que respalde esta hipótesis, los nuevos descubrimientos, como el busto de mármol, parecen fortalecer la conexión del sitio con el periodo final del Egipto ptolemaico.
La relevancia de estos hallazgos no radica únicamente en la identidad de Cleopatra, explica Martínez, sino en cómo nos ayudan a comprender las interacciones culturales, políticas y religiosas de esta fascinante época.
El trabajo en Taposiris Magna no se limita a la superficie. Las investigaciones submarinas han revelado estructuras que alguna vez formaron parte del templo y otras edificaciones cercanas. La erosión, causada por siglos de actividad natural, ha llevado a la sumersión gradual de partes del complejo, creando un paisaje único bajo el agua.
El Ministerio de Turismo y Antigüedades destacó que estas exploraciones son fundamentales para reconstruir la vida y las prácticas ceremoniales en la región. A través de estas investigaciones, los arqueólogos esperan responder preguntas no solo sobre Cleopatra, sino también sobre el papel de Taposiris Magna como un punto de convergencia cultural en los últimos años del Egipto independiente.

Un legado que aún sorprende
El busto encontrado en Taposiris Magna, aunque controvertido, es un recordatorio del poder simbólico que Cleopatra VII tiene en la imaginación colectiva. Ya sea que la estatua represente o no a la reina, el descubrimiento subraya la riqueza histórica de un sitio que aún guarda secretos esperando ser revelados.
El debate continúa, y las excavaciones también. Tal vez, algún día, los muros de Taposiris Magna revelen las respuestas definitivas sobre una de las figuras más intrigantes de la historia.
Referencias:
- Egyptian Ministry of Tourism and Antiquities. New Discoveries at Taposiris Magna Temple, West of Alexandria: Foundation Deposits and Artifacts Shed Light on Late Ptolemaic History. Facebook. Consultado el 10 de diciembre de 2024.