El amor es un proceso a veces inexplicable. Se dice que la atracción física, la similitud, la proximidad con la persona, la química y atracción emocional o el contexto social y cultural son factores que influyen a la hora de enamorarse de una persona.
Pero ¿qué hay del proceso de elección? ¿cómo elegimos a la persona de la que nos enamoramos, según los expertos? ¿Por qué nos fijamos en una persona y no en otra? Además de ser un proceso altamente individual y subjetivo, depende de una combinación única de factores.

La ciencia detrás del enamoramiento
Factores físicos y emocionales en la atracción
El enamoramiento es un proceso que mezcla tanto la atracción física como la emocional. La atracción física suele ser lo primero que notamos y puede estar influenciada por características como la simetría facial, que muchas veces se asocia con buena salud genética. Sin embargo, la atracción emocional es igualmente importante y se desarrolla a medida que conocemos mejor a la otra persona. La química emocional, como la empatía y la conexión intelectual, puede ser incluso más determinante en el desarrollo de una relación duradera.
Además, el contexto social y cultural en el que vivimos también impacta en nuestras preferencias. Las normas culturales pueden influir en lo que consideramos atractivo o deseable en una pareja. Por ejemplo, en algunas culturas, la inteligencia o el sentido del humor pueden ser más valorados que la apariencia física. Estos factores contribuyen a que el enamoramiento sea una experiencia única para cada individuo, ya que cada persona tiene su propio conjunto de valores y criterios de atracción.

El papel de la biología y la cultura en la elección de pareja
La elección de pareja es un proceso altamente individual y subjetivo, influenciado tanto por la biología como por la cultura. La antropóloga y neurobióloga Helen Fisher ha dedicado gran parte de su carrera a estudiar cómo estos factores se combinan. Fisher sugiere que, aunque todos compartimos un circuito cerebral para el amor romántico, las razones por las que nos sentimos atraídos por una persona en particular son complejas y difíciles de precisar.
La biología proporciona una base sobre la cual se construyen nuestras preferencias, pero la cultura moldea cómo interpretamos esas señales biológicas. Por ejemplo, el entorno socioeconómico y las experiencias de la infancia pueden influir en nuestras decisiones amorosas. Aunque podemos sentir atracción hacia muchas personas, los factores culturales y biológicos nos llevan a elegir a una persona específica sobre otras.
El impacto de los sistemas cerebrales en el amor
Dopamina, serotonina, testosterona y estrógenos
El amor y el enamoramiento están íntimamente ligados a la química cerebral. Según Helen Fisher, existen cuatro sistemas cerebrales principales que juegan un papel crucial: dopamina, serotonina, testosterona y estrógenos. Cada uno de estos sistemas está asociado con ciertos rasgos de personalidad que influyen en nuestras preferencias de pareja.
La dopamina, por ejemplo, está relacionada con la búsqueda de novedad y emoción, lo que hace que las personas con niveles altos de dopamina busquen parejas que compartan su entusiasmo por la aventura. Por otro lado, la serotonina se asocia con la estabilidad y el orden, lo que lleva a las personas con altos niveles de este neurotransmisor a buscar parejas con valores similares y una vida predecible.
Cómo influyen en la personalidad y la atracción
Los niveles de testosterona y estrógenos también juegan un papel en nuestras relaciones amorosas. La testosterona está vinculada a características como la lógica y la competitividad, y las personas con altos niveles de este hormona tienden a sentirse atraídas por parejas que son comprensivas y expresivas, cualidades asociadas con altos niveles de estrógenos. Estas combinaciones químicas no solo influyen en la atracción inicial, sino también en la dinámica de la relación a largo plazo.
El equilibrio entre estos sistemas cerebrales puede determinar cómo nos relacionamos con los demás y qué tipo de pareja buscamos. Al entender cómo estas sustancias químicas afectan nuestro comportamiento, podemos obtener una mejor comprensión de por qué nos enamoramos de ciertas personas y no de otras.

El entorno y las influencias personales en el enamoramiento
Entorno cultural y socioeconómico
El entorno en el que crecemos y vivimos tiene un impacto significativo en nuestras decisiones amorosas. Las normas culturales y las expectativas sociales pueden influir en lo que consideramos atractivo o deseable en una pareja. Por ejemplo, en algunas culturas, el estatus socioeconómico puede ser un factor determinante en la elección de pareja, mientras que en otras, la compatibilidad emocional y la conexión personal pueden ser más importantes.
Además, el entorno socioeconómico puede afectar nuestras oportunidades de conocer a posibles parejas. Las personas tienden a relacionarse con individuos de entornos similares, lo que puede limitar o expandir el grupo de personas con las que interactuamos y, por ende, con las que podríamos enamorarnos. Estas influencias externas, junto con nuestras experiencias personales, moldean nuestras preferencias y decisiones amorosas.
La perspectiva de Helen Fisher sobre el amor
Helen Fisher ofrece una perspectiva única sobre el amor al combinar la biología con la cultura. Según Fisher, el amor romántico es un fenómeno que transforma nuestra percepción de la persona amada, dándole un valor especial que trasciende la lógica y la razón. Este fenómeno puede explicarse en parte por la activación de ciertos circuitos cerebrales que nos hacen centrar nuestra atención en una persona específica.
Para Fisher, el amor no es solo una emoción, sino un impulso biológico que nos motiva a formar vínculos fuertes y duraderos. Este impulso es esencial para la supervivencia de la especie humana, ya que fomenta la unión y el compromiso entre parejas, lo que a su vez garantiza el cuidado y la protección de las crías durante su largo periodo de dependencia.

Las características del amor romántico
Obsesión, deseo sexual y conexión emocional
El amor romántico se caracteriza por una serie de emociones y comportamientos intensos que pueden parecer irracionales desde una perspectiva externa. Entre estas características, la obsesión es una de las más prominentes. Cuando nos enamoramos, tendemos a pensar constantemente en la persona amada y a idealizar sus cualidades, lo que puede llevar a una percepción distorsionada de la realidad.
El deseo sexual es otro componente fundamental del amor romántico. Este impulso biológico nos motiva a buscar la cercanía física con la persona amada y a establecer un vínculo íntimo que refuerza la conexión emocional. Sin embargo, el deseo sexual por sí solo no es suficiente para mantener una relación a largo plazo; la conexión emocional es igualmente crucial para el desarrollo de un amor duradero.
El valor especial de la persona amada
Cuando nos enamoramos, todo lo relacionado con la persona amada adquiere un significado especial. Desde su voz y su sonrisa hasta los lugares que frecuenta, cada detalle se convierte en una fuente de fascinación. Esta percepción única y personal es lo que hace que el amor sea una experiencia tan poderosa y transformadora.
El amor romántico nos lleva a centrarnos en las cualidades positivas de la persona amada, dejando de lado sus defectos y debilidades. Esta idealización puede ser tanto una bendición como una maldición, ya que, aunque fortalece el vínculo emocional, también puede crear expectativas poco realistas que, a la larga, pueden llevar a la desilusión.

El amor como fenómeno evolutivo
Su papel en la supervivencia de la especie humana
Desde una perspectiva evolutiva, el amor ha jugado un papel crucial en la supervivencia de la especie humana. Este sentimiento ha evolucionado para fomentar la unión y el compromiso entre parejas, lo que a su vez garantiza la protección y el cuidado de las crías durante su largo periodo de dependencia. Sin el amor, sería difícil imaginar cómo podría haber evolucionado la humanidad hasta convertirse en la sociedad compleja que conocemos hoy.
El amor no solo asegura la supervivencia de la descendencia, sino que también fortalece los lazos sociales y fomenta la cooperación entre individuos. Estos vínculos son esenciales para el funcionamiento de las comunidades humanas, ya que permiten la formación de redes de apoyo y colaboración que benefician a todos sus miembros.
El razonamiento autoesencialista en la percepción del otro
El razonamiento autoesencialista es un concepto psicológico que puede influir en cómo percibimos a los demás en el contexto del amor. Este razonamiento se basa en la idea de que creemos tener una esencia interna que define quiénes somos y que buscamos en los demás. Cuando encontramos a alguien que parece compartir esa esencia, sentimos una conexión especial que puede llevar al enamoramiento.
Este tipo de razonamiento puede explicar por qué nos sentimos atraídos por personas que comparten nuestros intereses, valores y creencias. Al ver reflejada nuestra esencia en el otro, percibimos una compatibilidad que fortalece el vínculo emocional y nos motiva a formar una relación más profunda.
Investigaciones y encuestas sobre el enamoramiento
Preferencias en sitios de citas
Las investigaciones sobre el enamoramiento han explorado cómo las preferencias de pareja varían en diferentes contextos, incluidos los sitios de citas en línea. Estas plataformas ofrecen una oportunidad única para observar cómo las personas eligen a sus parejas en un entorno controlado y basado en perfiles. Estudios realizados por Helen Fisher y sus colegas han analizado las preferencias de millones de personas en sitios de citas, revelando patrones interesantes sobre cómo la gente elige a sus parejas.
Los resultados de estas investigaciones sugieren que las personas tienden a buscar parejas que compartan sus intereses y valores, lo que confirma la importancia del razonamiento autoesencialista en el proceso de elección de pareja. Además, los datos indican que las características personales, como la química emocional y la compatibilidad intelectual, son factores determinantes en la atracción y el enamoramiento. Estas investigaciones continúan aportando valiosas perspectivas sobre los misterios del amor y el enamoramiento, ayudándonos a comprender mejor cómo y por qué nos enamoramos de una persona y no de otra.
Referencias
- Helen E. Fisher, Lucy L. Brown, et al. 'Reward, Addiction and Emotion Regulation Systems Associated With Rejection in Love'. J Neurophysiol (2010)
- Helen E. Fisher. '¿Qué ocurre en nuestro cerebro cuando nos enamoramos?. Aprendemos Juntos BBVA (2020)
- Chu, C. 'Self-Essencialist Reasoning Underlies the Similarity-Attraction Effect'. Journal of Personality and Social Psychology