La digitalización de los últimos años ha provocado cambios en muchos aspectos de nuestra vida diaria, incluidas la comunicación y las relaciones comerciales. El ticket digital, que supone una alternativa a los recibos en papel, supone un importante avance en el consumo. En España esta tendencia se ha afianzado, avalada por datos que destacan sus múltiples beneficios tanto para consumidores como para empresas. Incluso las facturas tendrán que ser todas digitales en España, como se ha sabido en septiembre de 2024. Adiós a las facturas en pdf, Excel o Word.

La digitalización de los últimos años ha provocado cambios en muchos aspectos de nuestra vida diaria, incluidas la comunicación y las relaciones comerciales. El ticket digital, que supone una alternativa a los recibos en papel, supone un importante avance en el consumo. En España esta tendencia se ha afianzado, avalada por datos que destacan sus múltiples beneficios tanto para consumidores como para empresas.
El ticket digital es preferible al ticket en papel porque ofrece mayor sostenibilidad, accesibilidad y durabilidad, además de facilitar la organización y reducir la huella ecológica. Te explicamos todo con detalle.
Sostenibilidad y reducción de la huella ecológica
Uno de los beneficios más evidentes del ticket digital es su contribución a la sostenibilidad ambiental. En España, el consumo de papel para emitir tickets y facturas es considerable. Un conocido supermercado estima que su proceso de paso al e-ticket podría evitar la impresión de 60 millones de tickets en papel al año. La adopción del ticket digital puede reducir drásticamente este número, minimizando la tala de árboles y el uso de recursos naturales. En Francia se estima que el papel usado anualmente equivale a una tala de 2 millones de árboles al año.

Además de la sostenibilidad, el ticket digital ofrece varias ventajas clave:
- Ahorro de espacio y facilidad de almacenamiento: Los tickets se almacenan de forma digital, eliminando la necesidad de acumular papeles.
- Facilidad de acceso y organización: Los consumidores pueden acceder a sus tickets desde cualquier dispositivo, lo que simplifica la gestión de sus compras.
- Reducción del riesgo de pérdida o deterioro: Al estar almacenados digitalmente, los tickets no se pierden ni se dañan como los de papel. Además, la impresión térmica no es duradera en el tiempo.
- Mayor seguridad y control: Los tickets digitales son más difíciles de falsificar y permiten un seguimiento más riguroso por parte de las empresas.
Además, el proceso de producción y transporte del papel genera emisiones de carbono significativas. Optar por tickets digitales no solo reduce el consumo de papel, sino también la huella de carbono asociada a su producción y distribución. La eliminación del papel en la emisión de tickets podría reducir las emisiones de CO2 significativamente.
¿Qué dice la ley?
La ley Crea y Crece, impulsada por el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, establece que las empresas prestadoras de servicios deben expedir y remitir facturas digitales a los particulares que los acepten o los soliciten. Específicamente, para comercios minoristas, agencias de viaje y servicios de transporte, la emisión de un ticket digital es obligatoria cuando la transacción se lleva a cabo por medios electrónicos.
"Como medida fundamental, la ley impulsa la adopción de la factura electrónica, modificando la normativa actual y ampliando la obligación de expedir y remitir facturas electrónicas a todas las empresas y autónomos en sus relaciones comerciales, lo que garantizará una mayor trazabilidad y control de pagos entre ellas. Esta medida permitirá obtener información fiable y ágil para conocer los plazos efectivos de pago, requisito indispensable para poder reducir la morosidad de manera eficaz" (Ley Crea y Crece).
Aunque más centrado en la fiscalización, el sistema de Suministro Inmediato de Información (SII) y la normativa TicketBAI en el País Vasco son ejemplos de cómo la digitalización está siendo implementada en el ámbito de la facturación y los tickets. Estos sistemas exigen que las empresas transmitan electrónicamente los datos de las transacciones a las autoridades fiscales en tiempo real, lo que también impulsa la adopción de soluciones digitales en lugar de papel
La copia del datáfono
"¿Quieres copia?", una pregunta habitual cuando pagamos con tarjeta o desde el móvil. Di que sí, al menos mientras no existan copias digitales. Además, tal como recomienda el Banco de España, lo idóneo es solicitar la copia para comprobar in situ si el pago se corresponde con lo explicitado en el ticket de compra.

El ticket térmico
Un ticket térmico es un tipo de recibo que se imprime utilizando tecnología de impresión térmica directa. Este tipo de papel es muy común en puntos de venta y transacciones comerciales debido a su bajo costo y rapidez de impresión. El ticket térmico está compuesto por varias capas que permiten la impresión sin la necesidad de tinta, aprovechando la reacción del papel al calor.
El componente central de un ticket térmico es el papel base, que actúa como soporte para las demás capas. Este papel es similar al papel convencional, pero está diseñado para resistir la fricción y el calor aplicados durante la impresión. Sobre este papel base se encuentra la capa térmica, que es el elemento crucial para la impresión. Esta capa contiene colorantes leuco y ácidos sensibilizadores. Los colorantes leuco son compuestos químicos incoloros que reaccionan al calor cambiando de color, generalmente a negro. Cuando el cabezal de la impresora térmica calienta selectivamente áreas de esta capa, se produce el texto o las imágenes visibles en el ticket.
El ticket digital es preferible al ticket en papel porque ofrece mayor sostenibilidad, accesibilidad y durabilidad, además de facilitar la organización y reducir la huella ecológica.
Para mejorar la durabilidad del ticket, muchos papeles térmicos incluyen una capa protectora adicional sobre la capa térmica. Esta capa tiene la función de proteger la impresión contra factores ambientales como la luz, la humedad y el contacto con aceites o productos químicos, que podrían afectar la legibilidad del ticket. Sin embargo, a pesar de esta protección, los tickets térmicos no son muy duraderos a largo plazo.

La exposición prolongada a la luz solar, altas temperaturas o humedad puede hacer que la impresión se desvanezca o se vuelva ilegible en cuestión de meses o incluso semanas. Esto significa que, aunque los tickets térmicos son adecuados para comprobantes de compra de corto plazo, no son ideales para conservar registros que necesitan mantenerse legibles durante varios años. Por esta razón, es común que las personas digitalicen estos tickets si necesitan conservarlos por un periodo prolongado.
Un aspecto adicional a considerar es el impacto ambiental y sobre la salud de los tickets térmicos. El papel térmico a menudo contiene bisfenol A (BPA) o bisfenol S (BPS), que son productos químicos utilizados para mejorar la reacción térmica. Estos compuestos han sido objeto de preocupación debido a sus posibles efectos negativos sobre la salud humana y el medio ambiente. Como respuesta, algunos fabricantes están comenzando a producir papeles térmicos libres de BPA, aunque estos todavía no están ampliamente disponibles en todos los mercados.
Por tanto, los tickets térmicos son prácticos y económicos, pero presentan limitaciones significativas en términos de durabilidad y sostenibilidad. Su uso debe ser considerado en función de la necesidad de conservación del documento y las implicaciones ambientales.
