Con el calificativo de “Reyes Católicos” conocemos el matrimonio entre Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón, en un período que se extendió desde el 1475 al 1516. Supuso la unión dinástica de Castilla y Aragón, el origen de la monarquía hispánica y, para muchos, de la propia España. El título de “Católicos” fue concedido por el papa Alejandro VI para reconocerles su contribución a la propagación del catolicismo. Un título, que aún se reconoce en el actual rey de España. A pesar de su relevancia histórica, la muerte de los Reyes Católicos es una de las principales incógnitas que perduran al estudiar su biografía.
La unión dinástica y el legado de los Reyes Católicos
Desde la unión de sus cortes hasta la muerte de los Reyes Católicos, la historia de Isabel I de Castilla y de Fernando II de Aragón es uno de los mayores éxitos de la política matrimonial entre los Reinos Hispánicos de las Edad Media.
Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón: Los Reyes Católicos
Posiblemente, los reyes más famosos de la historia de España, y dos de los personajes más famosos de la historia de la humanidad por el contexto en que gobernaron: en plena formación del mundo moderno, con el descubrimiento de América, que integró al nuevo continente en el circuito mundial y terminó por consolidar el nacimiento de la globalización.
La alianza matrimonial también permitió a los Reyes Católicos coordinar sus esfuerzos para completar la Reconquista, culminando con la toma de Granada en 1492. Este logro no solo puso fin al dominio musulmán en la península, sino que también reforzó la autoridad de los monarcas y les permitió centrarse en otras ambiciones, como la exploración y expansión ultramarina. Con su apoyo a Cristóbal Colón, facilitaron el descubrimiento de América, un evento que transformó el mundo y marcó el inicio de la era moderna.

El título "Católicos" y su significado
El título de "Católicos" otorgado por el papa Alejandro VI no fue un simple gesto simbólico, sino un reconocimiento a la importancia de Isabel y Fernando en la defensa y expansión del cristianismo. Tras la caída de Granada, los Reyes Católicos implementaron políticas de unificación religiosa que incluyeron la expulsión de los judíos en 1492 y la conversión forzosa de los moriscos. Estas acciones, aunque controvertidas, fueron vistas como un esfuerzo por consolidar la fe católica en la península.
Además, su apoyo a los Estados Pontificios en Nápoles y Sicilia en su rivalidad con Francia, así como sus campañas en el norte de África contra los piratas berberiscos, reforzaron su reputación como defensores del cristianismo. Este título, que aún se reconoce en el actual rey de España, simboliza el papel crucial que jugaron en la configuración de la identidad religiosa y política de Europa en su tiempo.
La muerte de Isabel la católica
Como es obvio, mucho se ha escrito sobre ellos, su unión, sus luces y sus sombras. ¿Pero qué fue de su final? ¿Qué ocurrió durante los últimos años de su reinado? ¿Cómo fue la muerte de los Reyes Católicos?

¿De qué murió Isabel la Católica?
Como en toda corte con poder, las intrigas y problemas políticos siempre están presentes. Más aún cuando la muerte de un monarca implica problemas de sucesión. La muerte de Isabel tuvo lugar doce años antes que la de Fernando, más de una década en la que se sucedieron hechos que bien pueden dar para una telenovela de domingo por la tarde.
Isabel ocupó el trono de Castilla en 1474. Treinta años después, el 26 de noviembre de 1504, falleció en Medina del Campo. Según las fuentes, murió a causa de una hidropesía (retención de líquido en los tejidos) ocasionada por un cáncer de útero. Con los conocimientos médicos de la época y las fuentes escritas como únicas pruebas, es difícil poder asegurar la realidad tras la muerte de Isabel de Trastámara.
Las difíciles condiciones de vida y su impacto en la salud de Isabel
Desde luego, no ayudó en nada la azarosa vida que padeció la reina de Castilla. A su muerte contaba con 53 años, pero parecía mucho más vieja para los cánones de la época. No en vano sufrió importantes dificultades: la guerra contra Juana la Beltraneja para hacerse con el trono; la muerte de dos de sus hijos y su nieto; sobrevivió a la malaria o al paludismo; las infidelidades de Fernando el Católico; la incipiente enfermedad mental de su hija Juana; y todo ello, se especula, con una enfermedad que pudo venir de su empeño por desplazarse siempre montando a caballo por sus territorios castellanos.
Problemas de sucesión
Isabel fue clara en su testamento: aunque la heredera al trono de Castilla era su hija Juana, debido a la incapacidad de esta, el rey Fernando regentaría el reino hasta que el infante Carlos (futuro emperador Carlos V) cumpliera la mayoría de edad. Pero el marido de Juana, Felipe de Habsburgo, no permitió el cumplimiento de este testamento.
Conocido como Felipe el Hermoso, hijo del emperador Maximiliano, desembarcó en La Coruña en 1506 para hacerse con el gobierno de Castilla junto a la heredera legítima, su mujer, Juana la Loca. Fernando tuvo que retirarse a sus tierras aragonesas, acosado por una nobleza que se puso inmediatamente de parte de Felipe el Hermoso. Pero las circunstancias favorecieron al Católico. En septiembre de 1506, murió Felipe y el camino del control de Castilla quedó despejado tras la muerte de los Reyes Católicos.

El papel de Juana y Felipe el Hermoso en la sucesión
Felipe el Hermoso, hijo del emperador Maximiliano, no tardó en actuar tras la muerte de Isabel. En 1506, desembarcó en La Coruña junto a Juana para reclamar el gobierno de Castilla. La llegada de Felipe provocó un cambio inmediato en la política castellana, ya que gran parte de la nobleza se alineó con él, obligando a Fernando a retirarse a sus tierras en Aragón. Sin embargo, el reinado de Felipe fue breve, ya que murió inesperadamente en septiembre de 1506.
La muerte de Felipe dejó a Juana en una posición vulnerable, y Fernando aprovechó la oportunidad para regresar al poder como regente. Juana, debido a su estado mental, fue confinada en el castillo de Tordesillas, donde permaneció hasta su muerte en 1555. La sucesión en Castilla se resolvió finalmente con la llegada de Carlos V, quien heredó tanto el trono de Castilla como el de Aragón, unificando así los reinos bajo un solo monarca.
La muerte de Fernando el Católico
La muerte de los Reyes Católicos no fue simultánea. Fernando el Católico murió una década después que su esposa Isabel. En su reinado en solitario, tuvo que hacer frente a los problemas de sucesión que esperaban a sus reinos. Se dice que, en el intento de seguir teniendo más descendencia, Fernando II de Aragón hizo uso de sustancias para mantener el vigor que acabaron por provocar su muerte.

¿Cómo murió Fernando el Católico?
Volvió a ocupar su puesto de regente en nombre de su hija Juana, a quien encerró en el castillo de Tordesillas hasta su muerte en 1555. Durante los dos años que fue apartado del poder castellano, Fernando jugó sus cartas para no perder su preeminencia política: se alió con su archienemigo, Luis XII de Francia, y se casó con su sobrina de 17 años, Germana de Foix, a quien se acusa de tener parte de culpa en la muerte de Fernando.
Fuentes históricas sugieren que Fernando murió debido a un fallo cardíaco, una hipótesis que ha ganado aceptación en estudios recientes. Sin embargo, las circunstancias que rodearon su muerte han dado lugar a especulaciones sobre otras posibles causas, como el uso de afrodisíacos, que se discutirá más adelante. La muerte de Fernando marcó el fin de una era, dejando a su nieto Carlos como el heredero de sus vastos dominios.
El misterio en torno a su muerte: afrodisíacos y fallos cardíacos
Los cronistas contaban que Germana de Foix, su joven esposa, administraba “potajes que ayudaran a la generación”. Es decir, el fallecimiento del rey católico se atribuyó al empleo abusivo de brebajes afrodisíacos para fortalecer su vigor, a base de testículos de toro y cantaridina, una sustancia que producen los escarabajos.Esta práctica pudo haber tenido un impacto negativo en la salud de Fernando, hasta llevarle a su fallecimiento.
Sin embargo, el historiador Jaime Elipe y la médico Beatriz Villagrasa publicaron un estudio en 2018 en el que pusieron en duda esta teoría y, tras analizar las fuentes escritas, concluyeron que Fernando murió por un fallo cardíaco.
Sea como fuere, en 1513, cayó enfermo y nunca más se repuso hasta que falleció el 23 de enero de 1516, en Madrigalejo, una aldea extremeña. La sepultura de los Reyes Católicos se encuentra en la capilla real de la Catedral de Granada, curiosamente junto al sepulcro de Juana la Loca y Felipe el Hermoso.
Fernando y su matrimonio con Germana de Foix
El matrimonio de Fernando con Germana de Foix, sobrina de Luis XII de Francia, fue una maniobra política. Con ella, se buscaba fortalecer las relaciones con Francia y asegurar la sucesión en Aragón. Germana tenía solo 17 años cuando se casó con Fernando, quien ya era un hombre mayor. A pesar de la diferencia de edad, la unión tuvo un impacto significativo en la política europea, aunque no logró producir un heredero que pudiera consolidar el poder de Fernando.
La relación entre Fernando y Germana ha sido objeto de especulación, especialmente en lo que respecta a su influencia en los últimos años de vida del monarca. Algunos cronistas sugieren que Germana pudo haber tenido un papel en la administración de los afrodisíacos que supuestamente contribuyeron a la muerte de Fernando. Sin embargo, estas afirmaciones deben ser consideradas con cautela, ya que las fuentes históricas no son concluyentes.

El legado de los Reyes Católicos
Aunque existan dudas sobre la muerte de los Reyes Católicos, lo que es innegable es la importancia histórica de estas dos figuras. Su reinado dio paso al primer proceso de globalización que conoció el mundo. A nivel español, su unión dinástica fue uno de los precedentes más claros para la definición de los territorios que hoy conocemos como España.
Dónde están enterrados los Reyes Católicos
Los Reyes Católicos, Isabel y Fernando, descansan en la capilla real de la Catedral de Granada, un lugar de gran significado histórico y simbólico. La elección de Granada como su lugar de sepultura no fue casual, ya que fue en esta ciudad donde culminó la Reconquista con la rendición del último reino musulmán en la península. La capilla real se convirtió en un mausoleo que refleja la importancia de su reinado y su contribución a la historia de España.
Junto a ellos, están enterrados Juana la Loca y Felipe el Hermoso, lo que subraya la complejidad de las relaciones familiares y políticas de la época. La capilla real es un lugar de peregrinación para aquellos interesados en la historia de España. Su arquitectura y arte reflejan el esplendor del Renacimiento español. La tumba de los Reyes Católicos sigue siendo un recordatorio de su legado y de los cambios trascendentales que impulsaron durante su reinado.
La influencia de los Reyes Católicos en la España moderna
El legado de los Reyes Católicos es innegable en la historia de España. Su reinado marcó el inicio de la transición hacia la España moderna, con reformas que sentaron las bases para el desarrollo del estado-nación. La unificación de Castilla y Aragón bajo su gobierno fue un paso crucial hacia la consolidación de un poder centralizado. Sus políticas religiosas y económicas marcaron el destino de los reinos hispánicos más allá de la muerte de los Reyes Católicos.
Además, el apoyo a la exploración y expansión ultramarina transformó a España en una potencia global. La influencia de los Reyes Católicos se extiende más allá de sus logros inmediatos. Su visión y decisiones estratégicas moldearon el curso de la historia europea y mundial. Su legado perdura en la cultura, la política y la identidad de España, y su impacto se siente hasta el día de hoy.
Referencias:
- Cervera, C. 2014. Un cáncer de útero acabó con Isabel «la Católica», la reina más poderosa de su tiempo. abc.es.
- Elipe, J y Villagrasa, B. 2018. El fin de un mito: causas clínicas de la muerte de Fernando el Católico. Stvdivum. Revista de Humanidades 24, 41-60. DOI: 10.26754/ojs_studium/stud.2018242605.
- Ortega, J. 2020. Fernando el Católico murió por un fallo cardíaco y no por tomar afrodisíacos. elmundo.es.
- Soria Mesa, E. 2013. Los últimos años del rey Fernando el Católico. Historia National Geographic 107, 80-91.