Si hay un género de cine que se caracterice por la espectacularidad, es el de los desastres naturales. Hay fanáticos irredentos de estas películas y también quienes las odian. Como también hay películas que han despertado la curiosidad del gran público, y cosechado éxitos indiscutibles en taquilla, y otras que han resultado una catástrofe total.
Aunque suele asumirse como un subgénero de la ciencia ficción, la mayoría de estas cintas tienen un abordaje que abunda en lo visual, con grandes efectos especiales y espectáculos panorámicos, generalmente a costa de una pobreza argumental, un guion lineal y una buena dosis de tópicos.
Las buenas obras de ciencia ficción parten del conocimiento científico del momento y dan un paso —o varios— hacia el futuro, exponiendo conocimientos ficticios sostenidos ‘a hombros de gigantes’ sobre el conocimiento previo. Pero, en ocasiones, obras que se ofrecen como ‘ciencia ficción’ toman elementos absolutamente fantásticos que obvian o incluso rechazan conocimientos científicos bien asentados. Algo perfectamente asumible, e incluso deseable, en una obra de fantasía, donde exista la magia y el mundo sea un disco plano sobre cuatro elefantes que navegan a lomos de una gran tortuga estelar, pero desastroso en una obra que se vende como ‘ciencia ficción’ y que pretende ser realista y creíble.
También es cierto que, por malas que sean estas películas desde el punto de vista científico, siguen siendo entretenidas y espectaculares y pueden ofrecer sesiones de cine divertidas, entre risas y palomitas.
El impacto del género de desastres naturales en el cine
Espectacularidad vs. profundidad argumental
Las películas de desastres naturales son conocidas por su espectacularidad, gracias a los avances en efectos visuales que permiten recrear desde terremotos hasta tsunamis con un realismo asombroso. Sin embargo, esta espectacularidad suele ir en detrimento de la profundidad argumental. A menudo, estas cintas sacrifican el desarrollo de personajes y tramas complejas en favor de escenas de acción impactantes. Esta tendencia ha generado críticas, ya que muchos filmes se perciben como superficiales, ofreciendo poco más que un festín visual que olvida la narrativa y el desarrollo emocional de sus personajes.
A pesar de estas críticas, es innegable que la espectacularidad de estas películas atrae a grandes audiencias, convirtiéndolas en éxitos de taquilla. La tensión y el drama que generan las catástrofes naturales en pantalla son elementos que capturan la atención del espectador, proporcionando una experiencia cinematográfica intensa. Sin embargo, la falta de profundidad argumental puede dejar a algunos espectadores insatisfechos, buscando más que solo efectos especiales y explosiones.
El equilibrio entre espectacularidad y narrativa es un desafío constante para los cineastas en este género. Aquellos que logran combinar ambos elementos de manera efectiva crean películas que no solo entretienen, sino que también invitan a la reflexión sobre las implicaciones humanas y éticas de los desastres naturales. Este equilibrio puede convertir una película de desastres en una obra maestra del cine, resonando en la memoria del público mucho después de que los créditos finales hayan pasado.
El límite entre ciencia ficción y fantasía
El género de desastres naturales a menudo se sitúa en la delgada línea que separa la ciencia ficción de la fantasía. Mientras que algunas películas intentan basarse en principios científicos para dar credibilidad a sus tramas, otras cruzan el umbral hacia la fantasía, presentando escenarios que desafían las leyes de la física y la lógica. Este enfoque puede resultar en películas que, aunque visualmente impresionantes, carecen de coherencia científica, lo que puede alienar a los espectadores más exigentes.
La ciencia ficción efectiva se basa en extrapolar conocimientos científicos actuales para imaginar futuros posibles. Sin embargo, muchas películas de desastres naturales ignoran esta premisa, optando por narrativas que desafían la credibilidad. Esto no solo afecta la percepción de la película como un todo, sino que también puede influir en la manera en que el público percibe los desastres naturales reales, distorsionando su comprensión de estos fenómenos.
Por otro lado, cuando las películas logran mantener un equilibrio entre la ciencia y la fantasía, pueden ofrecer una experiencia enriquecedora. Estas películas no solo entretienen, sino que también educan, proporcionando una visión más realista de los desastres naturales y sus posibles consecuencias. El desafío para los cineastas es encontrar ese equilibrio, creando historias que sean tanto emocionantes como informativas, sin sacrificar la integridad científica en el proceso.
Las tres peores películas de desastres naturales
"Geostorm": escenarios improbables y cambio climático mal representado
"Geostorm" es un ejemplo clásico de cómo una película de desastres naturales puede fallar en su intento de combinar ciencia ficción con una narrativa coherente. La premisa inicial, que gira en torno a un futuro afectado por el cambio climático, prometía una exploración interesante de un tema relevante. Sin embargo, la ejecución de la película se desvía rápidamente hacia escenarios improbables y exagerados que desafían la lógica y la ciencia. La representación del cambio climático en "Geostorm" es superficial, centrándose más en escenas de acción que en un análisis significativo del problema.
El enfoque de "Geostorm" en el espectáculo visual eclipsa cualquier intento de profundizar en las causas y consecuencias del cambio climático. Las escenas de destrucción masiva, aunque visualmente impactantes, carecen de contexto y no logran transmitir la gravedad del fenómeno que intentan representar. Además, la película presenta tecnologías ficticias que no solo son inverosímiles, sino que también distraen de la narrativa central, dejando a los espectadores con más preguntas que respuestas.
A pesar de sus deficiencias, "Geostorm" puede ser vista como una advertencia sobre los peligros de priorizar los efectos especiales sobre la narrativa en el cine de desastres naturales. La película destaca la importancia de un enfoque equilibrado que combine la ciencia y la ficción de manera coherente, ofreciendo una experiencia cinematográfica que sea tanto entretenida como informativa. Al hacerlo, se puede evitar que el género caiga en la trampa de la superficialidad, proporcionando historias que resuenen con el público de manera más profunda.

"El núcleo": errores científicos y argumentos poco creíbles
"El núcleo" es otra película de desastres naturales que ha sido criticada por su falta de rigor científico y sus argumentos poco creíbles. La trama gira en torno a la idea de que el núcleo de la Tierra ha dejado de girar, lo que provoca catástrofes globales. Aunque la premisa podría haber sido una oportunidad para explorar conceptos científicos interesantes, la película se desvía hacia el territorio de la fantasía, presentando soluciones tecnológicas que desafían la lógica y la física.
Uno de los principales problemas de "El núcleo" es su uso de tecnología ficticia, como el "láser sónico" y el "inobtenio", que carecen de base científica. Estos elementos no solo restan credibilidad a la película, sino que también subestiman la inteligencia del público, que espera una representación más precisa de la ciencia en la ficción. Además, la película se basa en una serie de coincidencias y soluciones convenientes que socavan la tensión y el drama de la narrativa.
A pesar de sus fallos, "El núcleo" sirve como un recordatorio de la importancia de la investigación científica en la creación de películas de desastres naturales. Los cineastas deben esforzarse por representar la ciencia de manera precisa y respetuosa, evitando caer en la tentación de sacrificar la lógica por el espectáculo. Al hacerlo, pueden crear historias que no solo entretengan, sino que también eduquen e inspiren al público a reflexionar sobre los desafíos reales que enfrenta nuestro planeta.

"2012": exageraciones sin base científica
El caso de 2012 (2009) es extremo. La misma premisa de partida ya desvía la película de cualquier atisbo de ciencia tras el desastre natural. En esta obra de Roland Emmerich, la base se encuentra en una hipotética —y falsa— profecía maya del fin del mundo en el año 2012. Esta profecía se ve cumplida por una mutación de los neutrinos procedentes del sol. ¿Cómo pueden ‘mutar’ partículas subatómicas si no tienen ADN? Es una pregunta que queda sin respuesta.
A lo largo del filme, se van sucediendo múltiples desastres sin aparente conexión unos con otros, de forma totalmente exagerada, y siempre persiguiendo a los protagonistas, mientras la humanidad trata de crear unas arcas de Noé imposibles. La obra se encumbra con un desplazamiento de placas tectónicas de miles de kilómetros en unas horas —fenómeno imposible— y una inundación que llega a cubrir parte del monte Everest —no existe agua suficiente en el planeta—, sucesos que parecen sacados del argumentario creacionista de la ‘tierra joven’. Todo un sinsentido que ha dotado a esta cinta del dudoso honor de ser la película de ciencia ficción peor valorada por los científicos de la NASA.
A pesar de sus deficiencias, "2012" destaca la importancia de un enfoque equilibrado en el cine de desastres naturales. Al combinar la ciencia y la ficción de manera coherente, los cineastas pueden crear historias que no solo entretengan, sino que también eduquen e inspiren al público. Al hacerlo, pueden evitar caer en la trampa de la superficialidad, proporcionando películas que resuenen con el público de manera más profunda y significativa.

Las tres mejores películas de desastres naturales
"Lo imposible": un relato realista basado en hechos reales
Si quieres que tu película sobre catástrofes naturales sea realista, rigurosa y relate lo que podría suceder en un desastre natural real, lo mejor es recurrir a un suceso real. Así es como el español José Antonio Bayona nos transporta a Tailandia, durante las navidades de 2004.
El 26 de diciembre, un terremoto de 9,3 en la escala sismológica de magnitud, con epicentro en el Océano Índico, al norte de la isla de Sumatra, provocó una serie de tsunamis devastadores de más de 30 metros de altura, que azotaron Indonesia, Tailandia, Malasia, Sri Lanka e India. En Lo imposible (2012), Bayona muestra con rigor y fidelidad lo sucedido antes y durante el desastre; cómo las aguas se retiran de la costa para dar lugar a una ola gigante, que avanza a toda velocidad tierra adentro, dejando a su paso solo caos y destrucción.
Tomando como recurso narrativo la historia de una familia de vacaciones en Tailandia, Bayona nos muestra también las terribles consecuencias del desastre. Nada se deja al azar o a la especulación, incluso la familia, compuesta por María Belón, Enrique Álvarez y sus tres hijos, Lucas, Simón y Tomás, es real, y colaboró activamente en la realización de la cinta.

"Contagio": una pandemia anticipada con realismo
"Contagio" es una película que destaca por su realismo y su capacidad para anticipar eventos futuros con una precisión inquietante. Estrenada en 2011, la película narra la rápida propagación de un virus mortal que se convierte en una pandemia global. Lo que diferencia a "Contagio" de otras películas del género es su enfoque en la ciencia y la precisión con la que retrata la respuesta mundial a una crisis de salud pública.
La película ofrece una visión detallada de cómo se desarrollaría una pandemia en el mundo real, desde la propagación del virus hasta la carrera por encontrar una vacuna. Este enfoque en la ciencia y la medicina no solo añade credibilidad a la narrativa, sino que también proporciona al público una comprensión más profunda de los desafíos que enfrentan los profesionales de la salud en situaciones de crisis. Además, "Contagio" aborda temas como el miedo, la desinformación y la respuesta gubernamental, ofreciendo una crítica social que resuena con el público.
"Contagio" es un recordatorio de la importancia de la preparación y la cooperación global frente a las amenazas de salud pública. Al combinar una narrativa convincente con una representación precisa de la ciencia, la película ofrece una experiencia cinematográfica que es tanto educativa como emocionante. Este enfoque único hace de "Contagio" una de las mejores películas de desastres naturales de todos los tiempos.

"No mires arriba": crítica social a través de la sátira
Un desastre inminente amenaza al ser humano y a los ecosistemas del planeta. Un desastre inicialmente evitable que los científicos han visto venir, pero que políticos y empresas se empeñan en ignorar. Cuando el desastre es patente y no se puede negar, se escoge no mirar hacia él. Y cuando ya es imposible evitarlo, el capitalismo más salvaje propone, como solución, ideas peregrinas para explotar comercialmente todo lo que el incidente pueda proporcionar.
"No mires arriba" utiliza la sátira para ofrecer una crítica mordaz de la sociedad moderna y su respuesta a las crisis globales. La película sigue a dos astrónomos que intentan advertir al mundo sobre un cometa que se dirige hacia la Tierra, solo para enfrentarse a la apatía y el escepticismo de los políticos y los medios de comunicación. A través de su humor oscuro y su narrativa incisiva, "No mires arriba" ofrece una reflexión sobre la negación y la manipulación mediática en tiempos de crisis.
La película destaca por su capacidad para abordar temas complejos de manera accesible y entretenida. Al utilizar la sátira para explorar la ignorancia política y la manipulación mediática, "No mires arriba" ofrece una crítica social que resuena con el público. La película no solo entretiene, sino que también invita a la reflexión sobre la importancia de la ciencia y la responsabilidad colectiva en la protección de nuestro planeta.
"No mires arriba" demuestra que las películas de desastres naturales pueden ser más que simples espectáculos visuales. Al combinar la sátira con una narrativa convincente, la película ofrece una experiencia cinematográfica que es tanto entretenida como significativa. Esta combinación única hace de "No mires arriba" una de las mejores películas de desastres naturales de todos los tiempos.

Temas recurrentes en el cine de desastres naturales
Ignorancia política y manipulación mediática
Uno de los temas más recurrentes en las películas de desastres naturales es la ignorancia política y la manipulación mediática. Estas películas a menudo retratan a líderes políticos que ignoran o minimizan las advertencias de los científicos, priorizando intereses económicos o políticos sobre la seguridad pública. Este enfoque no solo añade tensión dramática a la narrativa, sino que también ofrece una crítica social de cómo las decisiones políticas pueden influir en la respuesta a las crisis.
La manipulación mediática también es un tema común en estas películas, con los medios de comunicación a menudo representados como sensacionalistas o desinformados. En lugar de informar al público de manera precisa y responsable, los medios pueden contribuir al pánico o la desinformación, exacerbando la crisis. Este enfoque destaca la importancia de la comunicación precisa y responsable en tiempos de crisis, y ofrece una crítica de la influencia de los medios en la percepción pública de los desastres.
Al abordar estos temas, las películas de desastres naturales no solo ofrecen entretenimiento, sino que también invitan a la reflexión sobre la relación entre la política, los medios y la ciencia. Estas películas pueden servir como un recordatorio de la importancia de la responsabilidad y la transparencia en la gestión de crisis, y de la necesidad de escuchar a los expertos en la toma de decisiones.
La lucha por la supervivencia y la naturaleza humana
La lucha por la supervivencia es un tema central en las películas de desastres naturales, explorando cómo los individuos y las comunidades responden a situaciones extremas. Estas películas a menudo retratan a personajes que enfrentan desafíos abrumadores, desde desastres naturales hasta crisis de salud pública, y muestran cómo la adversidad puede sacar lo mejor y lo peor de la naturaleza humana. Este enfoque no solo añade tensión dramática a la narrativa, sino que también ofrece una reflexión sobre la resiliencia y el espíritu humano.
Las películas de desastres naturales también exploran la importancia de la cooperación y la solidaridad en tiempos de crisis. A menudo, los personajes deben trabajar juntos para superar los desafíos y encontrar soluciones, destacando la importancia de la colaboración y el apoyo mutuo. Este enfoque ofrece una visión optimista de la capacidad del ser humano para superar la adversidad, y puede inspirar al público a reflexionar sobre su propio papel en la protección de nuestro planeta y nuestras comunidades.
Al abordar estos temas, las películas de desastres naturales no solo ofrecen entretenimiento, sino que también invitan a la reflexión sobre la naturaleza humana y la importancia de la cooperación en tiempos de crisis. Estas películas pueden servir como un recordatorio de la capacidad del espíritu humano para superar incluso los desafíos más abrumadores, y de la importancia de trabajar juntos para proteger nuestro planeta y nuestras comunidades.
La importancia del cine de catástrofes naturales en la reflexión social
Crítica social y representación visual
El cine de catástrofes ofrece una plataforma única para la reflexión social, utilizando la narrativa visual para explorar temas complejos y ofrecer críticas incisivas de la sociedad moderna. A través de la representación de desastres naturales y crisis globales, estas películas pueden abordar temas como la ignorancia política, la manipulación mediática y la responsabilidad colectiva, invitando al público a reflexionar sobre su papel en la protección de nuestro planeta y nuestras comunidades.
La representación visual es una herramienta poderosa en el cine de catástrofes, permitiendo a los cineastas transmitir la magnitud y el impacto de los desastres de manera efectiva. A través de efectos especiales y técnicas cinematográficas avanzadas, estas películas pueden ofrecer una experiencia inmersiva que captura la atención del público y lo sumerge en la narrativa. Esta combinación de narrativa visual y crítica social puede resonar con el público de manera profunda, ofreciendo una experiencia cinematográfica que es tanto entretenida como significativa.
Al abordar temas complejos y ofrecer críticas sociales a través de la narrativa visual, el cine de catástrofes puede inspirar al público a reflexionar sobre su propio papel en la protección de nuestro planeta y nuestras comunidades. Estas películas pueden servir como un recordatorio de la importancia de la responsabilidad colectiva y la cooperación en la gestión de crisis, y de la necesidad de escuchar a los expertos en la toma de decisiones. Al hacerlo, el cine de catástrofes puede ofrecer una experiencia cinematográfica que es tanto entretenida como significativa, resonando con el público de manera profunda y duradera.
Referencias
- Ebert, R. (2008). Las Poeres Peliculas de la Historia. Ediciones Robinbook.
- Sánchez, S. (2007). Películas claves del cine de ciencia-ficción. Ediciones Robinbook.
- Brito-Alvarado, L. X., Guadalima, N. G., & Alvarez, P. C. (2021). Imaginarios y narrativas cinematográficas sobre el fin del mundo. Caleidoscopio-Revista Semestral de Ciencias Sociales y Humanidades, (44).