Cantidad de sangre en el cuerpo humano: mitos y realidades

La sangre es esencial para la vida, y circula por nuestro cuerpo transportando sustancias esenciales como el oxígeno y nutrientes a las células y tejidos del cuerpo, además de desechos metabólicos para su eliminación.
Cuánta Sangre Tenemos En El Cuerpo Humano

¿Sabías que tenemos la suficiente sangre en nuestro cuerpo como para llenar casi una jarra de leche de 4 litros? De hecho, en promedio, un adulto posee entre 4,5 a 5,5 litros de este vital fluido circulando en su sistema. Sin embargo, la cantidad de sangre en el cuerpo humano varía según la etapa de la vida y el género. Por ejemplo, el hombre suele tener entre 4,25 y 5,67 litros, mientras que la mujer tiene alrededor de 4,25 litros.

Cantidad promedio de sangre en el ser humano

El cuerpo humano está diseñado para mantener un equilibrio en el volumen de sangre, asegurando que todos los órganos y tejidos reciban el oxígeno y los nutrientes necesarios. Este equilibrio es crucial para el funcionamiento óptimo del organismo y para la regulación de la temperatura corporal, así como para la eliminación de desechos metabólicos.

Cantidad de sangre en hombres y mujeres

La cantidad de sangre en el cuerpo humano varía según diversos factores, incluyendo el género. Aunque los adultos tienen entre 4,5 y 5,5 litros de sangre, los hombres tienden a tener una cantidad ligeramente mayor, oscilando entre 4,25 y 5,67 litros. Por otro lado, las mujeres suelen tener alrededor de 4,25 litros. Estas diferencias se deben a factores fisiológicos como la masa muscular y el volumen corporal. La cantidad de sangre también se relaciona con el peso corporal, lo que hace que estas cifras puedan variar de una persona a otra.

Aunque estas cifras son promedios, es importante reconocer que la cantidad de sangre no solo depende del género, sino también de otros factores como la altura y el estado de salud general. Las mujeres, por ejemplo, pueden experimentar cambios en su volumen sanguíneo debido a fluctuaciones hormonales y durante el embarazo. 

Bolsa-de-sangre. Foto: Gemini
Un adulto posee entre 4,5 y 5,5 litros de sangre circulando en su sistema. Imagen: Gemini

Variación de sangre según la edad y el peso

La cantidad de sangre en el cuerpo humano no solo varía por género, sino también según la edad y el peso. En los adultos, el volumen sanguíneo es mayor debido al tamaño y la masa corporal. Sin embargo, en los niños, la sangre representa un porcentaje más significativo de su peso corporal. Esta proporción cambia a medida que crecen, lo que refleja la adaptación del sistema circulatorio a las necesidades cambiantes del cuerpo en desarrollo.

El peso corporal también influye significativamente en el volumen de sangre. En situaciones normales, la sangre representa aproximadamente el 7-8% del peso corporal total de una persona. Las personas con un mayor peso corporal tienden a tener más sangre, ya que el cuerpo necesita más volumen para abastecer adecuadamente todos los tejidos. Este es un factor importante a considerar en la medicina, especialmente en situaciones como la donación de sangre, donde el volumen extraído debe ser seguro para el donante.

Particularidades de la sangre en diferentes etapas de la vida

Desde la gestación hasta la vejez, la composición y función de la sangre evolucionan. Estos cambios están estrechamente relacionados con las necesidades cambiantes del organismo en cada etapa de la vida. 

Cantidad de sangre en niños

La cantidad de sangre en los niños es menor en comparación con los adultos, pero en proporción a su tamaño y peso, representa un porcentaje mayor de su masa corporal. Esto es crucial para el crecimiento y desarrollo, ya que una mayor proporción de sangre facilita una mejor distribución de oxígeno y nutrientes esenciales a los tejidos en crecimiento. En términos absolutos, un niño pequeño tiene menos sangre que un adulto, pero esta cantidad es suficiente para satisfacer sus necesidades metabólicas.

A medida que los niños crecen, el volumen de sangre aumenta gradualmente. Durante la infancia, el cuerpo experimenta cambios rápidos en tamaño y composición, lo que requiere ajustes en el volumen sanguíneo. Este proceso es un ejemplo de la capacidad adaptativa del cuerpo humano para satisfacer las necesidades cambiantes de cada etapa de la vida. La sangre también juega un papel vital en la regulación de la temperatura corporal y en el transporte de hormonas, que son esenciales durante las fases de crecimiento y desarrollo.

Es importante destacar que, aunque los niños tienen menos sangre en términos absolutos, su sistema circulatorio está diseñado para ser altamente eficiente. El corazón de un niño late más rápido que el de un adulto, lo que ayuda a mantener una circulación adecuada y a satisfacer las demandas metabólicas de su cuerpo en crecimiento.

Componentes de la sangre.
La sangre está compuesta por glóbulos rojos, glóbulos blancos, plasma y plaquetas.

Proporción de sangre en bebés recién nacidos

En los bebés recién nacidos, la proporción de sangre en relación con su peso corporal es notablemente alta. Tienen entre 75 y 80 mililitros de sangre por kilogramo de peso corporal, lo que es considerablemente más que en los adultos. Esta alta proporción es esencial para asegurar que los tejidos en rápido desarrollo reciban suficiente oxígeno y nutrientes. Por ejemplo, un recién nacido que pese alrededor de 3 kg tendrá aproximadamente 0,2 litros de sangre, una cantidad que es crítica para su supervivencia y desarrollo inicial.

La comparación de la cantidad de sangre en recién nacidos con otros mamíferos, como gatos y perros, puede proporcionar una perspectiva interesante. Un gato de tamaño promedio, que pesa alrededor de 4,5 kg, tiene una cantidad similar de sangre que un bebé humano recién nacido. En contraste, un perro de 36 kg tiene aproximadamente 3 litros de sangre, destacando cómo la cantidad de sangre se correlaciona con el tamaño y las necesidades metabólicas de diferentes especies.

La alta proporción de sangre en los recién nacidos también refleja la necesidad de un sistema circulatorio eficiente desde el nacimiento. Este sistema es fundamental para la regulación de la temperatura, la eliminación de desechos y el soporte del metabolismo acelerado que caracteriza a los primeros meses de vida.

Aumento del volumen sanguíneo en mujeres embarazadas

Durante el embarazo, el cuerpo de la mujer experimenta una serie de cambios notables, uno de los cuales es el aumento del volumen sanguíneo. Este incremento es crucial para apoyar el crecimiento y desarrollo del feto. Las mujeres embarazadas pueden experimentar un aumento del 30 al 50% en su volumen sanguíneo total. Esto equivale a aproximadamente 1 a 1,5 litros adicionales de sangre, que son necesarios para satisfacer las demandas del cuerpo en esta etapa.

El aumento del volumen sanguíneo durante el embarazo no solo beneficia al feto, sino que también es esencial para el bienestar de la madre. Este incremento ayuda a asegurar un suministro adecuado de nutrientes y oxígeno al útero, la placenta y otros órganos vitales. Además, prepara al cuerpo para el parto, donde se puede perder una cantidad significativa de sangre. Este aumento también es crucial para manejar los cambios en la presión arterial y para proporcionar un margen de seguridad en caso de hemorragia durante el parto.

El cuerpo humano está diseñado para adaptarse a las demandas cambiantes del embarazo, y el aumento del volumen sanguíneo es un ejemplo perfecto de esta capacidad. Estos cambios son vitales para el éxito del embarazo y el bienestar tanto de la madre como del bebé, asegurando que ambos reciban el apoyo necesario durante este período crítico.

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Se extraen aproximadamente 450 mililitros de sangre de cada donante. Imagen: Gemini.

El proceso de donación de sangre

La donación de sangre es un acto altruista que salva vidas y contribuye significativamente a la atención médica. La sangre donada es esencial para una variedad de tratamientos médicos, incluyendo transfusiones para pacientes con anemia, cirugías, y en situaciones de emergencia. La disponibilidad de sangre segura y suficiente es un componente crítico de los sistemas de salud en todo el mundo, y la donación regular es vital para mantener un suministro adecuado.

 ¿Cuánta sangre se dona?

Durante una donación estándar, se extraen aproximadamente 450 mililitros de sangre de un donante. Esta cantidad es segura para la mayoría de los adultos, ya que representa solo una pequeña fracción del volumen total de sangre en su cuerpo. La cantidad extraída está cuidadosamente calculada para no comprometer la salud del donante, garantizando que puedan continuar con sus actividades diarias sin problemas significativos.

Es importante que los donantes cumplan con ciertos requisitos de salud y peso para asegurar que la donación sea segura. Las personas con un peso inferior a 50 kg pueden experimentar efectos adversos, como mareos o náuseas, debido a la disminución en el volumen sanguíneo. Por lo tanto, se establecen criterios estrictos para proteger la salud de los donantes y maximizar la eficacia de las donaciones.

Componentes de la sangre donada

La sangre donada se compone de varios componentes esenciales que desempeñan funciones críticas en el cuerpo humano. Estos componentes incluyen hematíes (glóbulos rojos), plasma, plaquetas y glóbulos blancos. Cada uno de estos elementos tiene un papel específico en el mantenimiento de la salud y el funcionamiento del organismo. Los glóbulos rojos son responsables del transporte de oxígeno desde los pulmones a los tejidos y del retorno de dióxido de carbono para su eliminación.

El plasma, que constituye alrededor del 55% del volumen total de sangre, es un líquido amarillento que transporta nutrientes, hormonas y proteínas por todo el cuerpo. Las plaquetas son cruciales para la coagulación de la sangre, ayudando a prevenir el sangrado excesivo en caso de lesiones. Los glóbulos blancos, aunque representan una pequeña fracción del volumen sanguíneo, son esenciales para el sistema inmunológico, protegiendo al cuerpo contra infecciones y enfermedades.

Después de la donación, la sangre se separa en estos componentes para su uso específico en pacientes que lo necesiten. Este proceso maximiza la utilidad de cada donación, permitiendo que un solo donante pueda ayudar a múltiples pacientes con diferentes necesidades médicas.

Cantidad-de-sangre-en-el-cuerpo-humano.-Donacion. Foto: Gemini
Un solo donante pueda ayudar a múltiples pacientes. Imagen: Gemini.

Tiempo de regeneración de los glóbulos rojos

Después de donar sangre, el cuerpo comienza un proceso de regeneración para reponer los glóbulos rojos perdidos. Este proceso es esencial para restaurar el volumen sanguíneo y mantener el equilibrio del sistema circulatorio. Los glóbulos rojos tienen una vida útil de aproximadamente 120 días, y la médula ósea los produce continuamente. Sin embargo, la regeneración completa de los glóbulos rojos después de una donación puede llevar de 4 a 6 semanas.

Durante este tiempo, el cuerpo trabaja intensamente para producir nuevos glóbulos rojos y restaurar los niveles de hemoglobina. Este proceso es un testimonio de la capacidad del cuerpo humano para adaptarse y recuperarse de cambios temporales en el volumen sanguíneo. La producción de nuevos glóbulos rojos es estimulada por la hormona eritropoyetina, que regula la producción en respuesta a las necesidades del cuerpo.

Es crucial permitir que el cuerpo se recupere completamente antes de realizar otra donación. Por esta razón, se establecen intervalos de tiempo específicos entre donaciones para asegurar que los donantes mantengan su salud y bienestar. Este enfoque garantiza que las donaciones sean seguras tanto para los donantes como para los receptores.

Frecuencia de donación recomendada

La frecuencia con la que se puede donar sangre está regulada para garantizar la salud y seguridad de los donantes. En general, los hombres pueden donar sangre hasta cuatro veces al año, mientras que las mujeres pueden hacerlo hasta tres veces. Este límite tiene en cuenta las diferencias fisiológicas entre géneros, incluyendo el volumen sanguíneo y los niveles de hierro, que tienden a ser más bajos en mujeres.

Entre cada donación, se recomienda un intervalo mínimo de dos meses para permitir que el cuerpo recupere completamente los glóbulos rojos y otros componentes sanguíneos. Este período de recuperación es crucial para mantener la salud del donante y asegurar que las donaciones futuras sean seguras y efectivas. Además, los donantes deben cumplir con ciertos criterios de salud y peso para participar en el proceso de donación, lo que ayuda a minimizar el riesgo de efectos adversos.

La donación regular de sangre es una práctica vital para mantener un suministro adecuado en los bancos de sangre. Sin embargo, es igualmente importante que los donantes cuiden de su salud y sigan las recomendaciones médicas para asegurar que el proceso sea beneficioso para todos los involucrados.

Importancia de la sangre y su composición

La sangre es un tejido vital que desempeña un papel fundamental en el mantenimiento de la vida. La composición precisa de la sangre puede variar entre individuos, pero su estructura básica es consistente. Esta consistencia es esencial para el funcionamiento óptimo del cuerpo y para mantener la homeostasis, el equilibrio interno que es vital para la salud y el bienestar.

Cantidad de Sangre en el Cuerpo Humano.
La producción de hemoglobina se compromete cuando no hay un suministro adecuado de hierro.

Composición de la sangre adulta

En los adultos, la sangre está compuesta principalmente por plasma, glóbulos rojos, glóbulos blancos y plaquetas. El plasma, que constituye aproximadamente el 55% del volumen sanguíneo, es un líquido que transporta nutrientes, hormonas y productos de desecho. Los glóbulos rojos son responsables del transporte de oxígeno y dióxido de carbono, mientras que los glóbulos blancos son esenciales para la defensa inmunológica.

Las plaquetas son fragmentos celulares que juegan un papel crucial en la coagulación de la sangre, ayudando a prevenir el sangrado excesivo. La composición de la sangre es un reflejo de sus múltiples funciones en el cuerpo, incluyendo el transporte de oxígeno, la regulación de la temperatura corporal y la protección contra infecciones. La sangre también es responsable de la distribución de hormonas y la eliminación de desechos metabólicos.

Importancia del hierro en la sangre

El hierro es un componente esencial de la sangre, desempeñando un papel crucial en la formación de la hemoglobina, la proteína de los glóbulos rojos que transporta el oxígeno. El hierro ayuda a mantener la forma y la función de los glóbulos rojos, permitiendo que el oxígeno se transporte eficientemente a los tejidos del cuerpo. Sin un suministro adecuado de hierro, la producción de hemoglobina se ve comprometida, lo que puede llevar a condiciones como la anemia.

La anemia es una afección caracterizada por una disminución en el número de glóbulos rojos o en la cantidad de hemoglobina, lo que resulta en una reducción de la capacidad del cuerpo para transportar oxígeno. Los síntomas de la anemia incluyen fatiga, debilidad y dificultad para respirar. Asegurar un suministro adecuado de hierro a través de la dieta es crucial para prevenir esta condición y mantener la salud general.

Además, el hierro es importante para el crecimiento y desarrollo, y juega un papel en la función inmunológica. Los alimentos ricos en hierro, como las carnes rojas, las legumbres y los vegetales de hojas verdes, son esenciales para mantener niveles adecuados de este mineral en el cuerpo y asegurar el funcionamiento óptimo del sistema circulatorio.

Referencias:

  • Izaguirre-Ávila, Raúl, & de Micheli, Alfredo. (2005). Evolución del conocimiento sobre la sangre y su movimiento: Parte II. El saber sobre su composición. Iatroquímica de la sangre. Revista de investigación clínica57(1), 85-97. doi: http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0034-83762005000100011&lng=es&tlng=es
  • Zalaquett, Ricardo. (2016). 400 años del descubrimiento de la circulación de la sangre: Harvey y la Filantropía. Revista chilena de cardiología35(2), 188-195. doi: https://dx.doi.org/10.4067/S0718-85602016000200015

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